El Banco de Japón (BOJ) ha observado una notable tendencia de los aumentos salariales a extenderse a las empresas más pequeñas y regionales, una medida destinada a atraer y retener a los empleados. Esta evolución se considera un indicador positivo para lograr una inflación sostenida cercana al objetivo del 2% fijado por el BOJ.
Según un resumen de la reunión trimestral de directores de sucursales regionales del Banco de Japón, se ha producido un efecto dominó desde las grandes corporaciones hasta las pequeñas y medianas empresas (PYME) en términos de importantes aumentos salariales a partir de las negociaciones salariales de este año. La tendencia es especialmente evidente en el sector servicios de varias regiones japonesas.
A pesar de no tener siempre beneficios suficientes para compensar el aumento de los gastos, algunas empresas regionales más pequeñas están dando prioridad a las subidas salariales para asegurar su plantilla. Esta estrategia sugiere un cambio en el panorama empresarial, en el que la retención y la atracción de empleados se han vuelto lo suficientemente críticas como para influir en las prácticas de remuneración, incluso entre las entidades más pequeñas.
El BOJ también informó de que el consumo general sigue siendo fuerte. El gasto de los turistas entrantes ha sido robusto, compensando las tendencias de consumo más débiles entre los hogares afectados por el aumento del coste de la vida.
Estos datos sobre las tendencias salariales desempeñarán un papel crucial en la próxima reunión de política monetaria del Banco de Japón, prevista para los días 30 y 31 de julio, en la que las decisiones sobre los tipos de interés serán un punto central de debate.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.