El gobernador del banco central de Eslovenia, Bostjan Vasle, ha instado al Banco Central Europeo (BCE) a abordar su próxima decisión sobre los tipos de interés con cautela, debido a los riesgos potenciales que podrían perturbar el proceso de desinflación de la zona euro.
Vasle, en una conferencia en Sintra (Portugal), subrayó la ausencia de una necesidad inmediata de una mayor relajación monetaria, afirmando que la política actual no está obstaculizando el crecimiento económico y que la inflación podría no retroceder tan rápidamente como se prevé.
Aunque el BCE redujo los tipos de interés en junio e indicó que podría producirse una relajación adicional en los próximos meses, no especificó cuándo tendría lugar el próximo recorte, lo que dio lugar a especulaciones y debates entre los responsables políticos.
Vasle, conocido por su postura conservadora en el Consejo de Gobierno del BCE, compuesto por 26 miembros, sugirió que no hay prisa por bajar más los tipos. Mencionó que la decisión sobre si recortar los tipos en septiembre o más adelante sigue sin decidirse.
La inflación de la zona euro experimentó un ligero descenso hasta el 2,5% en junio, y se espera que ronde este nivel durante el resto del año antes de descender hacia el objetivo del BCE del 2% a finales de 2025.
Vasle indicó que si la economía evoluciona en línea con el escenario de referencia actual, las expectativas del mercado de recortes de los tipos de interés coincidirían con sus opiniones. Actualmente, los inversores prevén uno o dos recortes de tipos para lo que queda de 2024 y una reducción total de aproximadamente 106 puntos básicos, equivalente a unos cuatro ajustes, para finales de 2025.
Aun así, Vasle advirtió que seguir esta línea de base es incierto. Factores como un posible repunte económico podrían aumentar las presiones sobre los precios, y un mercado laboral tenso podría provocar una inflación impulsada por los salarios.
Destacó la sólida confianza de los consumidores, el crecimiento constante y la rigidez del mercado laboral como indicadores de una inflación persistente en los servicios, que los responsables políticos temen que pueda afianzarse y ejercer una presión alcista prolongada sobre los precios.
Vasle señaló los factores internos, incluido el impulso de la indexación salarial, como impulsores de la probable persistencia de la inflación de los servicios. Las próximas decisiones de política monetaria del BCE serán objeto de un atento seguimiento, ya que se trata de equilibrar la necesidad de fomentar la estabilidad económica con el objetivo de mantener la inflación cerca de su objetivo.
Reuters ha colaborado en la elaboración de este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.