En una reunión clave con funcionarios chinos celebrada hoy en Pekín, el Ministro alemán de Economía, Robert Habeck, subrayó que los aranceles propuestos por la Unión Europea sobre los productos chinos, en particular los vehículos eléctricos (VE), no pretenden ser un "castigo". La posible imposición de fuertes aranceles por parte de la UE se produce tras una investigación de nueve meses de la Comisión Europea sobre si las empresas chinas se han beneficiado injustamente de subvenciones.
Habeck, primer alto funcionario europeo que visita el país desde que la UE propuso los aranceles, mantuvo conversaciones con el Presidente de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China, Zheng Shanjie. Durante el diálogo sobre clima y transformación, Habeck aclaró que el planteamiento de la UE difiere del de países que han utilizado aranceles punitivos, como Estados Unidos, Brasil y Turquía. Subrayó que las medidas de la UE pretenden establecer normas comunes e iguales de acceso al mercado, en lugar de penalizar a las empresas chinas.
Los aranceles propuestos han sido objeto de polémica, y China ha advertido de una posible guerra comercial. Zheng expresó su preocupación, afirmando que los aranceles perjudicarían tanto a China como a la UE, e instó a Alemania a liderar dentro de la UE para "hacer lo correcto". También refutó las acusaciones de subvenciones injustas, atribuyendo el desarrollo de la nueva industria energética china a las ventajas tecnológicas, de mercado y de la cadena industrial.
Está previsto que los derechos provisionales se apliquen el 4 de julio, y que los definitivos, que suelen durar cinco años, se impongan una vez concluida la investigación el 2 de noviembre. Habeck animó a los funcionarios chinos a que se comprometieran seriamente con las conclusiones del informe de la UE y lo utilizaran como base para futuras discusiones o negociaciones.
Además de las cuestiones comerciales, la reunión se centró en la profundización de la cooperación entre Alemania y China en la transición ecológica. Esta fue la sesión plenaria inaugural del diálogo sobre el clima desde que ambas naciones firmaron un memorando de entendimiento en junio de 2023.
La Agencia Internacional de la Energía informó de que China instaló cerca de 350 gigavatios de capacidad renovable en 2023, más de la mitad del total mundial, superando potencialmente este año su objetivo para 2030. Aunque Habeck elogió la expansión de las energías renovables en China, también señaló la importancia de tener en cuenta las emisiones globales de CO2. El carbón sigue dominando el suministro eléctrico de China, país que contribuye de forma significativa al consumo mundial de carbón.
Habeck y Zheng debatieron el equilibrio entre la expansión de las energías renovables y la dependencia del carbón, y Zheng explicó la dependencia de China de las centrales eléctricas de carbón como medida de seguridad. Habeck reconoció la necesidad de considerar las implicaciones renovables en el sistema energético, sugiriendo enfoques alternativos al uso extensivo del carbón.
Tras la reunión con Zheng, Habeck habló con el ministro chino de Comercio, Wang Wentao. Está previsto que Wang aborde el tema de los aranceles con el Comisario europeo Valdis Dombrovskis por videoconferencia esta tarde.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.