El presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, indicó el martes en una conferencia sobre política monetaria en Portugal que el banco central estadounidense necesita más pruebas sustanciales de una disminución de la inflación antes de considerar una reducción de los tipos de interés.
A pesar de los recientes datos que muestran una desaceleración de la inflación, con la medida de inflación preferida por la Fed, el índice de precios de los gastos de consumo personal, sin aumentar en mayo y la tasa de 12 meses de aumento de los precios cayendo al 2,6%, Powell hizo hincapié en la necesidad de certeza de que estas cifras reflejan con precisión la tendencia subyacente.
Las declaraciones de Powell se producen en un momento en que la Reserva Federal ha mantenido el tipo de interés oficial de referencia entre el 5,25% y el 5,5% desde julio del año pasado. El banco central está deliberando actualmente sobre el momento adecuado para relajar la política monetaria a medida que la inflación se acerca gradualmente al objetivo del 2%.
Sin embargo, con la inflación todavía más de medio punto porcentual por encima del objetivo y descrita como "elevada" en la declaración de política monetaria del 12 de junio, la Reserva Federal está adoptando un enfoque prudente.
Los inversores esperan con impaciencia la reunión de la Reserva Federal de los días 17 y 18 de septiembre, en la que se prevé un recorte inicial de los tipos de un cuarto de punto porcentual. La decisión dependerá en gran medida de los próximos informes económicos, como el informe de empleo de junio, que se publicará el viernes, y el índice de precios al consumo de junio, previsto para el 11 de julio.
La Reserva Federal también está considerando las implicaciones más amplias de un recorte de tipos, incluido el riesgo potencial de mantener una política monetaria restrictiva durante demasiado tiempo, lo que podría poner en peligro la actual baja tasa de desempleo si se produce una desaceleración económica.
Los responsables políticos se centran especialmente en garantizar que cualquier reducción inicial de los costes de endeudamiento marque el inicio de un ciclo completo de relajación monetaria, que conduzca a un nivel de tipos que ni estimule ni obstaculice la inversión y el gasto de las empresas y los hogares.
El momento y la estrategia para el primer recorte de tipos son objeto de cuidadosa consideración entre los funcionarios de la Fed, y muchos abogan por la paciencia y una espera más larga para confirmar la tendencia de la inflación antes de tomar medidas.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.