La Reserva Federal ha desplazado su foco de atención de la inflación al mercado laboral, lo que indica un posible cambio en la dirección de la política monetaria, tal y como señaló el presidente Jerome Powell durante su discurso del viernes en la conferencia anual de Jackson Hole. Las declaraciones de Powell sugieren que la Fed podría reducir pronto los tipos de interés para hacer frente a los riesgos emergentes del mercado laboral y evitar un mayor debilitamiento de las condiciones del mercado de trabajo.
La tasa de desempleo actual se sitúa en el 4,3%, que Powell ha indicado que pretende mantener. Se trata de un cambio respecto a los niveles previos a la pandemia, cuando la tasa de paro llegó a ser del 3,5% en 2019. La tasa actual de la Fed del 5,25%-5,50% se considera restrictiva para la economía y puede poner en riesgo el empleo.
También está significativamente por encima de la estimación mediana del 2,8% para la tasa "neutral" a más largo plazo. Los próximos informes sobre el empleo serán cruciales para determinar el ritmo y el alcance de los recortes de tipos necesarios para alcanzar el pleno empleo.
En septiembre, los funcionarios de la Reserva Federal presentarán proyecciones actualizadas de los tipos de interés, que reflejarán su evaluación del ritmo necesario de recortes de tipos. Esta actualización se produce tras un cambio en el lenguaje de la Fed, que ahora expresa la misma preocupación por el mercado laboral y la inflación. Este cambio de tono comenzó en enero, cuando la Fed reconoció el equilibrio de riesgos entre los objetivos de empleo e inflación.
Persiste la preocupación por la solidez del mercado laboral, ya que los últimos aumentos de empleo en julio sumaron sólo 114.000, cifra en línea con las expectativas previas a la pandemia, pero inferior a la media de la era de la pandemia. La relación entre puestos de trabajo vacantes y desempleados también ha disminuido a 1,2 a 1, volviendo a los niveles anteriores a la pandemia.
La presidenta de la Fed de Boston, Susan Collins, se mostró convencida de la resistencia del mercado laboral y de la posibilidad de que la tasa de desempleo se estabilice. Sin embargo, la gobernadora de la Fed, Adriana Kugler, expresó su preocupación por la posibilidad de que el mercado laboral sea más débil de lo que parece, sugiriendo que la relación real entre empleos y desempleados podría estar más cerca de 1,1, cerca del punto de equilibrio, y que otras medidas del desempleo podrían ofrecer una imagen diferente del mercado laboral.
La próxima reunión de la Reserva Federal está prevista para los días 17 y 18 de septiembre, y en ella los funcionarios deliberarán sobre el estado del mercado laboral y el alcance de los recortes de tipos necesarios. Esta reunión se celebra tras dos años de lucha contra la inflación, en los que los tipos subieron a máximos de un cuarto de siglo sin que el mercado laboral sufriera un impacto significativo. Sin embargo, la atención se ha centrado ahora en el empleo, y se ha intensificado la sensación de urgencia en torno a esta cuestión.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.