La agitación política en Francia ha provocado una caída significativa de los mercados financieros del país, con el índice CAC 40 experimentando su mayor pérdida semanal en más de dos años. Tras el inesperado llamamiento del presidente Emmanuel Macron a una votación anticipada, la euroescéptica Agrupación Nacional, liderada por Marine Le Pen, ha tomado la delantera en las encuestas de opinión.
Este cambio, combinado con una nueva alianza de partidos de izquierda, ha aumentado la preocupación de los inversores por la posibilidad de que un primer ministro de extrema derecha aplique políticas económicas nacionalistas y de alto gasto.
El índice CAC 40 se desplomó a su punto más bajo desde enero, con un descenso del 6% sólo esta semana. Los valores de mediana capitalización, a menudo más sensibles a los cambios económicos internos, sufrieron una caída aún mayor, del 9%, la más pronunciada desde las perturbaciones del mercado causadas por la pandemia de marzo de 2020.
Las instituciones financieras se han visto especialmente afectadas, y grandes bancos como BNP Paribas (EPA:BNPP), Credit Agricole (EPA:CAGR) y Societe Generale (EPA:SOGN) han sufrido caídas superiores al 10% en sus cotizaciones esta semana. Esto equivale a una pérdida aproximada de 19.000 millones de dólares de capitalización bursátil desde el pasado viernes, según datos del London Stock Exchange Group.
La incertidumbre política también ha presionado a la deuda pública francesa. El diferencial entre los costes de endeudamiento a 10 años de Francia y Alemania se ha ampliado a 78 puntos básicos a fecha de hoy, un nivel no visto desde la crisis de la eurozona en 2012. Este diferencial es indicativo de las primas más elevadas que los inversores exigen ahora para mantener la deuda pública francesa frente a la alemana de referencia.
El coste de endeudamiento del Estado francés ha superado al del portugués para un periodo de 10 años, una situación que no se producía al menos desde 2005. Los analistas de UBS señalan que, aunque la ampliación de los diferenciales podría presentar una oportunidad de compra, es probable que los inversores adopten una postura prudente hasta que haya mayor claridad sobre los resultados de las elecciones y las posibles políticas fiscales.
El euro ha sido otra de las víctimas de los recientes acontecimientos políticos, depreciándose alrededor de un 1% frente al dólar, la libra esterlina y el franco suizo esta semana, y alcanzando mínimos de casi dos años frente a la libra. La volatilidad de la divisa es evidente, con la volatilidad de las opciones a un mes, tanto frente al dólar como frente a la libra, en su nivel más alto en más de un año.
En medio de estas reacciones del mercado, el coste de asegurar la deuda francesa contra el impago se ha disparado. El swap de incumplimiento crediticio a cinco años de Francia se ha ampliado a 36 puntos básicos hoy, frente a solo 24 puntos básicos el 7 de junio, alcanzando máximos no vistos desde la pandemia y, antes de eso, las elecciones presidenciales de 2017, cuando se temía una presidencia de Le Pen.
Los inversores y los participantes del mercado se preparan para fluctuaciones potencialmente más significativas a medida que la situación política en Francia continúe desarrollándose.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.