MADRID (Reuters) - La Audiencia Nacional ha admitido a trámite una querella de dos accionistas contra Caixabank (MC:CABK), el holding de participaciones Criteria y varios altos cargos por "operaciones presuntamente irregulares" en varias transacciones corporativas, incluida la compra del banco portugués BPI (LS:BBPI).
La querella denuncia irregularidades "en torno al contrato de permuta de Caixabank con su accionista de control Criteria (en diciembre de 2015) cuyo fin último era la compra del banco portugués BPI", dijo la Audiencia en un comunicado.
El Alto tribunal dijo que investigará presuntos delitos de abuso de mercado, es decir información privilegiada, y administración desleal.
Además, analizará si se produjeron delitos societarios como falsedad de cuentas anuales o de documentos que deban reflejar la situación jurídica y económica de la entidad como por presunta imposición de acuerdos abusivos en la junta de accionistas.
Un portavoz de CaixaBank negó irregularidades y un portavoz de Criteria rehusó realizar comentarios.
La Audiencia dijo era competente en este caso dado que la cifra del perjuicio asciende a cientos de millones de euros y que el quebranto sufrido por la entidad bancaria habría afectado a todos sus accionistas.
En el año 2015, CaixaBank acordó vender a Criteria sus participaciones en Bank of East Asia (OTC:BKEAY) (BEA) y en el mexicano Grupo Financiero Inbursa (MX:GFINBURO) a cambio de efectivo y acciones de CaixaBank para autocartera.
Los denunciantes afirman que estas operaciones generaron pérdidas para la entidad cotizada y, por lo tanto, para los accionistas minoritarios.
"CaixaBank reafirma que todas las operaciones realizadas para la toma de control de BPI así como la permuta de las acciones en BEA e Inbursa con Criteria fueron realizadas en cumplimiento estricto de los requisitos legales y sometidas al conocimiento o autorizaciones de los reguladores pertinentes", declaró un portavoz de la entidad.
La querella pide investigar también la concesión un crédito de 400 millones al Banco Financiero de Angola (BFA), controlado por la inversora angoleña Isabel Dos Santos, para que eliminara las restricciones a la adquisición de BPI, agregó el tribunal.
El banco español lanzó una opa sobre BPI en 2016 después de que los accionistas de la entidad portuguesa aprobaran eliminar una limitación del 20 por ciento en los derechos de voto, una de las condiciones impuestas por el grupo catalán a su oferta.
(Información de Emma Pinedo y Andrés González; editado por Jose Elías Rodríguez)