Por Deisy Buitrago
CARACAS, 23 mayo (Reuters) - Venezuela presentó el martes un nuevo sistema cambiario que funcionará a través de subastas de divisas con precios establecidos en bandas fijadas por el Banco Central, con el cual el Gobierno busca "normalizar" el flujo de dólares necesarios para activar la deprimida economía.
El mecanismo, el quinto que pone en funcionamiento el Gobierno del presidente Nicolás Maduro, está enmarcado en el estricto control de cambios vigente desde 2003 y sustituye al Sistema Marginal de Divisas (Simadi), bajo el cual las divisas eran vendidas en alrededor de 700 bolívares por dólar.
El ministro de Economía, Ramón Lobo, explicó que a través del Sistema de Divisas de Tipo de Cambio Complementario Flotante de Mercado (Dicom) las personas naturales podrán comprar hasta 500 dólares trimestrales y las personas jurídicas hasta un máximo de 400.000 dólares cada mes.
El jueves será convocada la primera subasta y el martes siguiente se dará el detalle de la adjudicación y serán publicados de los resultados. El ministro no especificó el tipo de cambio de arranque.
"Con este mecanismo nosotros aspiramos en primera instancia a normalizar todo el funcionamiento del sistema cambiario, lo vamos a optimizar", dijo Lobo a periodistas.
Los interesados en participar en las subastas deberán registrarse en el portal del Banco Central de Venezuela (BCV)(www.bcv.org.ve), en el del Dicom (www.dicom.gob.ve) y tener cuentas en bolívares y dólares en la banca pública.
"El BCV es la autoridad que va a definir el límite superior e inferior de la banda, que se van a dar a conocer en el momento en que se realice la convocatoria", agregó el ministro.
El andamiaje del control de cambios venezolano también está compuesto por el sistema Dipro, de tipo de cambio protegido, donde el dólar cotiza a 10 bolívares, y está destinado mayormente a la compra de alimentos y medicinas por parte del sector público. Las autoridades no se refirieron a este sistema.
Economistas esperan que el Dicom esté focalizado en el sector privado que, en medio de la profunda crisis y el fuerte impacto negativo que ha tenido en sus ingresos la caída de la factura petrolera, se queja de no contar con los recursos necesarios para mantener el ritmo de sus importaciones de materias primas.
Venezuela atraviesa una aguda recesión, con escasez de alimentos y medicinas e inflación de tres dígitos. Esta situación ha agitado los ánimos políticos y llevado a millones de personas a protestar contra el Gobierno socialista de Maduro. Venezuela también opera un mercado no regulado, donde la moneda estadounidense alcanzaba el martes alrededor de 5.800 bolívares, según el portal estadounidense dolartoday.
El Gobierno ha intentado de varias maneras desinflar el avance del dólar "paralelo", pero expertos dicen que esto no será posible sin una gran inyección de dólares a la economía, algo que dudan en medio de la estrechez de recursos.
(Escrito por Eyanir Chinea; Editado por Silene Ramírez)