Charles Daniel P, vicepresidente ejecutivo de Cohen & Steers, Inc. (NYSE:CNS), vendió recientemente una parte significativa de sus participaciones en la empresa. Según una reciente presentación ante la SEC, Daniel vendió un total de 6.868 acciones ordinarias de Cohen & Steers el 2 de diciembre de 2024, a precios que oscilaron entre 103,73 y 104,18 dólares por acción. Las transacciones ascendieron a un valor total de aproximadamente 712.462 dólares.
Tras estas ventas, Daniel conserva la propiedad directa de 46.243 acciones de la empresa. Además, adquirió 203 acciones a través de unidades de acciones restringidas equivalentes a dividendos, que se concedieron en relación con el dividendo del cuarto trimestre del emisor. Estas acciones le correspondían a Daniel por unidades de acciones restringidas no invertidas de años anteriores.
Los inversores pueden tomar nota de estas transacciones, ya que reflejan cambios en las participaciones del ejecutivo en la sociedad de gestión de inversiones.
En otras noticias recientes, Cohen & Steers dio a conocer una cifra preliminar de sus activos bajo gestión (AUM) a octubre de 2024, que ascienden a 89.700 millones de dólares, lo que supone un descenso respecto a los 91.800 millones anteriores. La empresa también anunció un crecimiento de las ganancias en el tercer trimestre, con un aumento de las ganancias por acción a 0,77 dólares desde 0,68 dólares, y un aumento de los ingresos a 133 millones de dólares desde 122 millones de dólares, marcando las primeras entradas netas positivas desde el primer trimestre de 2022.
Cohen & Steers también informó del nombramiento de Karen Wilson Thissen como miembro de su Consejo de Administración. La compañía declaró un dividendo en efectivo para el cuarto trimestre de 0,59 dólares por acción, pagadero a los accionistas registrados al 18 de noviembre de 2024.
Estos últimos acontecimientos sugieren que Cohen & Steers está sorteando los cambios del sector y aprovechando su experiencia en activos reales e ingresos alternativos. La empresa espera unos ratios de remuneración estables y un aumento del 6-7% en gastos generales y administrativos para el año, junto con 1.000 millones de dólares en reembolsos, repartidos en dos trimestres. A pesar de los retos, incluidas las salidas en el subasesoramiento de Japón, la empresa sigue centrada en su desarrollo estratégico.
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