Investing.com -- La senadora Elizabeth Warren ha expresado su preocupación por la importante participación de Elon Musk en el proceso de transición y la próxima administración del presidente electo Donald Trump. Como la persona más rica del mundo y propietario de varias empresas importantes, el papel no oficial de Musk en la transición ha sido calificado por Warren como un "enorme conflicto de intereses".
Musk, cuyas empresas tienen importantes contratos y relaciones regulatorias con el gobierno federal, fue el mayor patrocinador individual de la campaña de Trump. Se ha implicado activamente en la transición, participando en llamadas con líderes extranjeros, acompañando a Trump a actos y encabezando una iniciativa destinada a mejorar la eficiencia del Gobierno.
Warren expresó su preocupación en una carta a Trump, afirmando que el público estadounidense es actualmente incapaz de discernir si el asesoramiento de Musk es en el mejor interés de la nación o simplemente beneficioso para su propia situación financiera. La senadora destacó los contratos que el Gobierno estadounidense tiene con las empresas de Musk, SpaceX y Tesla (NASDAQ:TSLA) Inc, y mencionó que estas compañías han sido objeto de "al menos 20 investigaciones o revisiones recientes" por parte de agencias reguladoras federales.
Warren también se refirió a noticias recientes sobre investigaciones de la Comisión del Mercado de Valores sobre la empresa de Musk Neuralink Corp. y su adquisición de Twitter Inc. La senadora por Massachusetts señaló que Musk ya se ha beneficiado financieramente de su relación con la transición de Trump, citando un informe de la CNBC según el cual la capitalización bursátil de Tesla aumentó en 70.000 millones de dólares en los cinco días siguientes a la elección de Trump.
La senadora Amy Klobuchar, de Minnesota, también subrayó la importancia de que la opinión pública conozca las motivaciones de las personas adineradas que trabajan en cualquier administración. El equipo de transición de Trump ha hecho público un plan ético que impide a sus miembros trabajar en asuntos específicos que puedan afectar a sus intereses financieros.
Sin embargo, Musk no está sujeto a las normas éticas que rigen a los empleados federales. A pesar de las preocupaciones de Warren, es poco probable que su carta tenga un impacto significativo, ya que los republicanos controlarán el Senado el próximo año. La portavoz de la transición de Trump, Karoline Leavitt, desestimó la carta de Warren y defendió el compromiso de la transición con los más altos estándares éticos y legales.
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