En un cambio notable, Boeing (NYSE:BA) ha comunicado a sus proveedores que el objetivo de producción de su avión 737 MAX se retrasará seis meses. El nuevo calendario fija el objetivo de producción en 42 aviones al mes para marzo de 2025, un retraso respecto al objetivo inicial de septiembre de 2024, según tres fuentes del sector. Este ajuste pone de manifiesto las dificultades a las que se enfrenta Boeing para aumentar la producción de su avión más vendido.
La compañía ha tenido que hacer frente a un mayor escrutinio en materia de seguridad y regulación tras el incidente ocurrido en enero, cuando un panel de la puerta se desprendió de un 737 MAX durante el vuelo. A pesar de este contratiempo, el objetivo oficial de producción de Boeing sigue siendo el mismo: alcanzar los 38 aviones al mes a finales de 2024, frente a los 25 aviones al mes de julio.
A finales de julio, el director financiero de Boeing, Brian West, se refirió a la naturaleza de la programación de la producción afirmando: "En el programa maestro, seguimos haciendo ajustes según sea necesario y gestionando proveedor por proveedor en función de los niveles de inventario. Nuestro objetivo sigue siendo mantener el ritmo de la cadena de suministro por delante del montaje final para apoyar la estabilidad."
Spirit AeroSystems, proveedor clave de Boeing, ha ajustado su producción en respuesta a la menor producción de Boeing, reduciendo su producción mensual de fuselajes del 737 MAX a 21 desde 31 a partir de agosto. Este cambio también ha afectado a la demanda de piezas de la cadena de suministro de Spirit. Joe Buccino, portavoz de Spirit AeroSystems, ha comentado los ajustes, afirmando que se realizan en consonancia con los acuerdos con los proveedores.
Los proveedores han manifestado que los cambios en los objetivos internos de Boeing han complicado su capacidad para prever y planificar sus calendarios de producción. Mientras tanto, Boeing Commercial Airplanes está realizando cambios organizativos internos para fusionar sus equipos de operaciones y contratos, con el objetivo de mejorar la comunicación con los proveedores. Sin embargo, Boeing no ha hecho ningún comentario sobre esta reestructuración interna.
La gestión de las relaciones con los proveedores es crucial para Boeing, sobre todo porque compite con Airbus por aumentar la producción para satisfacer la creciente demanda de transporte aéreo.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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