Los analistas de JPMorgan (NYSE:JPM) sugieren que los inversionistas den prioridad a la seguridad ante el aumento de las tensiones geopolíticas alimentadas por los conflictos en Oriente Medio.
Estas tensiones están agravando los retos a los que se enfrentan los activos de riesgo y la actividad económica, como la subida de las tasas de interés, escriben los analistas en una nota a los clientes.
"Esperamos que el mercado cotice en un rango más amplio, pero a medio plazo seguimos siendo negativos, ya que los vientos en contra para los mercados son cada vez más fuertes y los vientos de cola más débiles, en nuestra opinión".
Los analistas recomiendan añadir un 1% a las asignaciones de deuda pública en las carteras de inversión. Este ajuste se debe a una combinación de factores, como el aumento del riesgo geopolítico, las valoraciones atractivas y el posicionamiento menos concurrido de la deuda pública.
También han aumentado la asignación al oro dentro de la cartera de materias primas. Esta decisión está motivada por la necesidad de una cobertura frente a la incertidumbre geopolítica y las expectativas de un retroceso de los rendimientos reales de los bonos.
Los analistas mantienen una postura defensiva en el mercado, que incluye una posición infraponderada en renta variable y crédito, una posición sobreponderada en efectivo y un mayor nivel de exposición a las materias primas.
"El debilitamiento del impulso de los PMI sugiere que el crecimiento de los beneficios en el 3T será probablemente negativo, mientras que la suavización de los precios corporativos podría llevar a una compresión de los márgenes. Los retrasos en el impacto de las tasas altos son más largos esta vez, pero creemos que la mayor parte de los efectos negativos aún están por llegar", afirman los analistas.
Cabe señalar que estos analistas habían sido algunos de los más optimistas de Wall Street durante la liquidación del mercado de 2022. Sin embargo, desde entonces han invertido su opinión, reduciendo las asignaciones a la renta variable debido al deterioro de las perspectivas económicas a lo largo de este año.
Señalan que persisten los riesgos, en particular para los productos cíclicos de consumo, como el comercio minorista, el lujo y los automóviles, y para sectores como el químico y el de semiconductores. Además, los analistas sugieren que los bancos podrían tener buenos resultados en el tercer trimestre, pero podrían estar acercándose a un punto de inflexión.