MADRID, 14 feb (Reuters) - El Ibex-35 de la bolsa española abrió el martes con ligeras caídas sin atreverse a atacar los 9.500 puntos tras las subidas de la víspera, con Enagás ENAG.MC como el mejor valor en las primeras operaciones tras anunciar sus cuentas de 2016.
El gestor de la red gasista española abrió con una subida de un uno por ciento tras anunciar que su beneficio neto creció un 1,1 por ciento por ciento el año pasado, hasta los 417,2 millones de euros, gracias a menores impuestos y a una mejor contribución de sus empresas participadas. atención estará puesta en la comparecencia semianual de (la presidenta de la Reserva Federal) Janet Yellen ante el Senado (16h española), especialmente interesante tras el anuncio de Trump de una reforma fiscal", dijeron analistas de Renta 4 (MC:RTA4).
Los índices bursátiles estadounidenses tocaron el lunes máximos históricos, con los inversores apostando a que los recortes impositivos prometidos por el presidente Donald Trump impulsarán a la economía.
En el selectivo español, algunas recogidas de beneficios en grandes valores frenaban al índice, con Santander SAN.MC cediendo un 0,4 por ciento después de ganar el lunes un 1,7 por ciento.
El resto de la banca también se pasó mayoritariamente al rojo tras dudas iniciales, con Caixabank CABK.MC quedando como el único valor financiero al alza con apenas una subida de un 0,2 por ciento
'Blue chips' como Telefónica TEF.MC e Inditex ITX.MC tampoco ayudaban al Ibex con un descenso de un 0,2 y un 0,1 por ciento, respectivamente, mientras que Repsol REP.MC perdía un 0,1 por ciento pese al avance del petróleo tras haber subido casi un dos por ciento la víspera.
El peor valor del selectivo español en las primeras operaciones era Gamesa GAM.MC , con un descenso de un 0,5 por ciento.
Media hora después de la apertura, el Ibex-35 .IBEX cedía un 0,09 por ciento, a 9.476 puntos, mientras que el índice paneuropeo FTSEurofirst 300 .FTEU3 perdía un 0,2 por ciento a 1.456,8 puntos.
En la zona euro, este martes se conocerán los datos de PIB del cuarto trimestre, que deberían confirmar crecimientos del 1,8 por ciento anual, así como la encuesta alemana ZEW de expectativas de febrero, tras conocerse que la economía alemana creció un 0,4 por ciento en el último tramo de 2016.