El índice bursátil de referencia chino CSI 300 experimentó un importante repunte el lunes, cerrando con una subida del 8,48%, lo que supone su punto más alto en más de un año. Esta notable subida se produce tras una serie de medidas de estímulo introducidas por Pekín la semana pasada y durante el fin de semana, destinadas a revitalizar la aletargada economía e impulsar el decaído mercado bursátil.
Según Dickie Wong, Director Ejecutivo de Investigación de Kingston Securities en Hong Kong, el giro es sustancial debido a la intensidad de las políticas, que incluyen instrucciones explícitas para frenar la caída de los precios de la vivienda y apuntalar el mercado bursátil. Wong destacó la afluencia de inversores extranjeros deseosos de no perderse nada, las consultas de los inversores minoristas locales sobre qué valores añadir y la precipitación de los inversores institucionales al mercado, que ha hecho subir el índice Hang Seng hasta cerca de 21.000 puntos.
Chi Lo, estratega jefe de mercado para Asia-Pacífico de BNP Paribas Asset Management en Hong Kong, observó que la reacción positiva del mercado no es sorprendente, dada la amplia participación de altos funcionarios del Gobierno en la aplicación de las medidas de flexibilización. Lo expresó su incertidumbre sobre si esto marca un punto de inflexión, pero subrayó que ciertamente no es el momento de salir del mercado chino.
Michael McCarthy, Director Comercial y Estratega de Moomoo Australia, mencionó un notable aumento de la actividad comercial hacia las acciones cotizadas en Hong Kong y expuestas a China, con empresas como Fortescue, productora de mineral de hierro, obteniendo buenos resultados en la bolsa australiana.
Kenny Ng, estratega de China Everbright Securities International en Hong Kong, reconoció la sorpresa del mercado ante el apoyo político de China, que sigue cobrando impulso. Ng ha estado recibiendo un número excepcional de llamadas de clientes en busca de asesoramiento sobre acciones y estrategias.
Wang Qing, Presidente de Shanghai Chongyang Investment Management, destacó el temor de los inversores a perderse algo, señalando que su empresa mantenía una elevada exposición al riesgo antes de los anuncios políticos y se ha beneficiado de la respuesta positiva del mercado.
Alice Shen, gestora de carteras de VanEck en Sídney, señaló que los clientes que antes habían evitado China ahora están mostrando interés, lo que supone un cambio con respecto al sentimiento de los últimos seis meses.
Wei Li, responsable de inversiones multiactivos de BNP Paribas en Shanghai, afirmó que el estímulo del Banco Popular de China, mayor de lo esperado, y las claras señales de la reunión del Politburó sugieren una relajación macroeconómica más enérgica y coordinada. Li anticipa que las promesas explícitas de estabilizar los mercados inmobiliarios y apoyar directamente al mercado bursátil impulsarán la confianza y podrían desencadenar nuevas subidas de la renta variable en China.
Vasu Menon, Director General de Estrategia de Inversión de OCBC en Singapur, advirtió a los inversores de que no se dejaran llevar por la euforia, haciendo referencia a la volatilidad del mercado chino y a la posibilidad de recogida de beneficios tras fuertes repuntes. Menon subrayó la importancia de la eficacia de las medidas de estímulo y la previsión de un estímulo fiscal agresivo para garantizar un crecimiento económico sostenido.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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