El 16 de septiembre comenzará en un tribunal de Nevada un litigio crucial sobre el control del imperio mediático de Rupert Murdoch, que incluye Fox News y el Wall Street Journal. El caso, que se desarrollará a puerta cerrada, se centra en el intento de Murdoch de alterar el fideicomiso irrevocable de la familia, con el objetivo de consolidar a su hijo mayor, Lachlan Murdoch, como sucesor de su conglomerado mediático.
Rupert Murdoch, de 93 años, pretende modificar el fideicomiso para evitar posibles interferencias de tres de sus hijos, que tienen opiniones políticas más moderadas que Lachlan. En la actualidad, el fideicomiso permite la transferencia de las acciones con derecho a voto de News Corp (NASDAQ:NWSA) y Fox a los cuatro hijos mayores de Murdoch, Prudence, Elisabeth, Lachlan y James, en el momento de su fallecimiento. Esta situación podría dar lugar a una lucha de poder, con la posibilidad de que tres hermanos voten más que el cuarto.
Lachlan Murdoch, ideológicamente en sintonía con la postura conservadora de su padre, dirige Fox y preside en solitario News Corp. Por el contrario, su hermano James Murdoch ha discrepado públicamente de las directrices editoriales de las empresas y ha apoyado causas progresistas, incluida una recaudación de fondos para el presidente estadounidense Joe Biden en 2021.
Los cambios propuestos en el fideicomiso están bajo escrutinio, y Rupert Murdoch debe demostrar que las enmiendas son de buena fe y no socavan los derechos de ningún beneficiario. La audiencia en Reno, lejos de los principales centros de medios de comunicación, abordará si los cambios sirven a los mejores intereses de los herederos.
Varias organizaciones de prensa han solicitado intervenir, pidiendo que el tribunal abra los registros y permita el acceso público a los procedimientos. Argumentan que el resultado de este caso reviste gran interés público debido a su posible impacto en el consumo mundial de medios de comunicación, la escena política y el empleo dentro del imperio mediático de Murdoch.
El caso está siendo seguido de cerca, ya que podría dar forma a la futura dirección de los medios de comunicación conservadores. Los representantes de Lachlan, James y Elisabeth Murdoch han declinado hacer comentarios, mientras que el abogado de Rupert Murdoch no ha respondido a las preguntas. Tampoco se ha podido contactar con un abogado de James, Elisabeth y Prudence.
La audiencia sentará potencialmente las bases para la próxima era de liderazgo dentro de uno de los conglomerados de medios de comunicación más influyentes del mundo.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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