Texas Instruments (NASDAQ:TXN), uno de los principales fabricantes de chips analógicos, ha registrado unos beneficios en el segundo trimestre que superan las previsiones de los analistas. Estos resultados se atribuyen a la estabilización de la demanda de chips analógicos en varios mercados, incluida la electrónica personal, que experimentó un exceso de oferta debido a la acumulación de existencias durante la pandemia.
El reciente repunte de las ventas de teléfonos inteligentes y ordenadores personales ha permitido a los proveedores agotar sus existencias de semiconductores, lo que ha provocado un aumento de los pedidos de chips de Texas Instruments, esenciales para alimentar estos dispositivos.
Los inversores han respondido positivamente al informe de resultados de la empresa, como demuestra la subida de aproximadamente el 16% del valor de las acciones de Texas Instruments en lo que va de año. La previsión de una recuperación del mercado analógico ha contribuido a esta subida.
Tras el anuncio, las acciones de la empresa experimentaron una subida del 4% en las operaciones ampliadas. En el segundo trimestre, Texas Instruments obtuvo unos beneficios de 1,22 dólares por acción, superando la estimación media de 1,16 dólares por acción según datos de LSEG.
De cara al futuro, la empresa ha facilitado una previsión de ingresos para el tercer trimestre con un punto medio de 4.100 millones de dólares, que coincide con las expectativas de los analistas del mercado. Esta previsión es una señal tranquilizadora para los inversores, deseosos de que la empresa siga funcionando en un mercado en recuperación.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.