por Patricia Guerrero Medina
Infosel, abril. 8.- En 1951 el periodista Pedro el "Mago" Septién narró un partido de béisbol para la estación de XEQ con el sabor que siempre caracterizó al cronista deportivo más aclamado del Siglo XX. El juego fue entre Azules de Veracruz --hoy Tigres de Quintana Roo-- contra Diablos Rojos de México.
Lo que nadie imaginó fue que llovió y el partido se suspendió, pero los radioescuchas no se dieron cuenta --al menos ese día--. Algunas versiones indican que el cronista narró a distancia ese mismo año la Serie Mundial, la transmisión se cortó y Septién mantuvo su vibrante narración de ese partido solo con los cables que le llegaban desde Estados Unidos. Anécdotas como esas le dieron el mote de "Mago".
Así como el "Mago" narró partidos a ciegas o que ni siquiera existieron, los periodistas deportivos de ahora enfrentan a un escenario más complejo que les exige creatividad.
El deporte mundial está congelado y mientras los gobiernos no logren controlar los contagios por el coronavirus covid-19 nada rodará, nadie anotará, los cronómetros no se usarán y los jueces no podrán determinar ganadores. Para los aficionados los domingos serán como los lunes y los lunes por la noche serán como las madrugadas. Solo habrá repeticiones.
Si nadie juega fútbol en México, si Lionel Messi no hace genialidades, si Lewis Hamilton y la escudería Mercedes no tienen un tricampeonato que defender o si Giannis Antetokounmpo no tiene una quinteta que aplastar, entonces los cronistas, comentaristas y en general los medios especializados tienen pocas opciones.
"Ha sido todo un reto y nosotros tenemos que seguir generando información sí o sí", dijo Eduardo Espinosa, editor de La Afición, el suplemento deportivo del diario Milenio, en entrevista telefónica. "Todo el deporte nacional está parado en estos momentos. El gran golpe que ha sufrido el periodismo deportivo en México es con el fútbol, porque es el deporte que predomina y el que más se sigue".
A la Liga MX se le suman la segunda división y las categorías inferiores o la Liga Mexicana de Béisbol, que tendrá que encontrar una nueva fecha para arrancar. A nivel internacional las ligas de fútbol europeas, la Champions League, o bien, las ligas profesionales de Estados Unidos como la Major League Baseball (MLB) o la National Basketball Association (NBA) son otros ejemplos. El Campeonato de Wimbledon --tenis-- ya fue cancelado, al igual que las primeras carreras de la Fórmula 1 o los torneos de golf.
Claro que lo más preocupante para los periodistas es la postergación de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, la Copa América y la Eurocopa de Naciones, eventos para los cuales los medios preparan sus coberturas con mucho tiempo de antelación por el interés general que suscitan.
Pero la sofisticación de las telecomunicaciones, y los raudales de información difícilmente permitirían que alguien replicara las hazañas del "Mago" Septién. Gigantes del sector como ESPN o Fox Sports en México optaron por varios días --en lo que adaptaban sus producciones desde sus casas-- emitir únicamente repeticiones.
Ante este escenario, los medios deportivos que no tienen el poderío económico y la reputación de los medios norteamericanos recurren a otras estrategias para llenar los vacíos que habitualmente son cubiertos con la información diaria generada de partidos, conferencias y eventos. Ahora, esos espacios son cubiertos con reportajes especiales a partir de un dato histórico, una figura reconocida dentro del mundo deportivo, estadísticas o comparativas de las disciplinas en México y otros lugares.
Otra alternativa --de acuerdo con Espinosa-- es adaptar los contenidos entorno a la pandemia para darles un enfoque deportivo, tal como lo ha trabajado el suplemento deportivo mediante especiales sobre las consecuencias físicas o psicológicas que el confinamiento puede tener en los atletas; o bien, que puedan serle de utilidad a los lectores, como consejos sobre las actividades que pueden realizar desde sus hogares.
Claro que la complejidad para generar contenidos deportivos también radica en las particularidades de cada medio, reconoció René Umanzor, editor de Récord, uno de los principales diarios especializados en deportes a nivel nacional.
"Es un momento demasiado difícil porque no sabemos cuándo vamos a volver a tener deportes. En el caso de Récord, tenemos muy claro que a donde queremos ir es a hacer más llevadero el momento, es difícil pero tenemos que intentarlo porque al final es nuestra labor como periodistas", dijo en una llamada con Infosel.
Además de la información relacionada al tema de coyuntura y de cómo se vincula al deporte, y la generación de historias mediante sucesos pasados de relevancia, el rotativo especializado recurrió incluso a la creación de secciones nuevas para cubrir un espacio visiblemente mayor al de un suplemento dentro de un diario de circulación nacional.
De esa forma, las notas, reportajes y crónicas sobre las jornadas de fútbol local e internacional; o las entrevistas con la figura deportiva del momento, son suplidas por recomendaciones de cine, series y otro tipo de entretenimiento que los lectores pueden disfrutar desde casa. También con una cobertura de la pandemia que puede ser de utilidad para aquellos que fuera de los medios deportivos difícilmente se acercan a otros medios.
Este tipo de contenidos, no obstante, podrían no lograr el objetivo deseado en la medida en que el público al que van dirigidos suele ser con frecuencia especializado.
"Ese tipo de especiales no me genera nada porque son cosas que ya sé o ya vi", dijo Víctor Flores, aficionado, sobre a las retransmisiones de eventos deportivos de gran calado, como el Super Bowl o las finales de otras competiciones a las que las televisoras abiertas o de paga han recurrido para llenar tiempo al aire.
Como él, muchos aficionados optan por reducir su consumo de contenidos deportivos e incrementar el uso de servicios vía streaming u otro tipo de entretenimiento, hecho que para las televisoras y otras plataformas de contenido multimedia dedicadas al deporte, representa una desventaja.
Para las televisoras, la falta de actividad deportiva --principalmente de fútbol--podría representar también un golpe a sus ingresos por publicidad, su principal fuente de recursos, al ser los eventos deportivos un escaparate atractivo para los anunciantes.
"Me ha cambiado todo --el parón deportivo--, porque no estoy haciendo fútbol, entonces estoy planeando nuevos contenidos para aportar a la empresa", dijo a Infosel otra fuente que pertenece a la producción de contenidos en vivo para una cadena de televisión abierta con alcance nacional, y que prefirió el anonimato.
Sin programación atractiva en la televisión, entonces los contratos publicitarios difícilmente podrán cerrarse, o bien, afectarán de sobremanera a aquellas empresas que cierran acuerdos que ligan la cantidad a pagar con el rating, como sucede con Grupo Televisa (MX:TLEVISACPO), la mayor empresa de televisión de habla hispana a nivel mundial.
Una situación similar sucede con aquellos medios digitales en los que el flujo de información suele ser multimedia y renovado constantemente, y cuyos resultados están sujetos al cumplimiento de métricas.
"Tratamos de generar un plan de trabajo porque esto parece que por lo menos va a ser un mes o mes y medio más", explicó un editor de contenido deportivo para web de otra de las televisoras. "Son dos meses de ver cómo dar los números para no caernos".
La tarea de generar contenidos en tiempos de crisis sanitaria resulta más complicada en medida que los principales clubes deportivos --salvo excepciones—redujeron al mínimo el fluir de información, incluso para sus aficionados. Paradójicamente, esta situación ha generado una mayor colaboración entre medios.
Ejemplo de ello es el esfuerzo que la Liga MX realizó para lanzar un torneo en línea de FIFA 2020, en el que cada equipo es representado por alguno de sus jugadores y que será transmitido --vía digital o al aire-- no solo por Televisa y TV Azteca (MX:AZTECACPO), sino por las televisoras de paga Fox Sports e ESPN.
El torneo iniciará este viernes y culminará el 7 de junio, de acuerdo al anuncio de la Liga MX.
Mientras ello sucede, los periodistas deportivos continúan en la búsqueda de alternativas para generar sus contenidos, a la sombra de la incertidumbre laboral que la ausencia de eventos generaría con cada día que pasa.
"No se ha tocado el tema, no hemos hablado sobre eso. Las juntas que hemos tenido han sido para ver el manejo de información y esas cosas", explicó el editor de la plataforma web, en la que colaboran casi un centenar de personas. "Pero creo que si esto no es solo abril y se llega a extender otro mes, podría existir incertidumbre en todos".
Infosel, abril. 8.- En 1951 el periodista Pedro el "Mago" Septién narró un partido de béisbol para la estación de XEQ con el sabor que siempre caracterizó al cronista deportivo más aclamado del Siglo XX. El juego fue entre Azules de Veracruz --hoy Tigres de Quintana Roo-- contra Diablos Rojos de México.
Lo que nadie imaginó fue que llovió y el partido se suspendió, pero los radioescuchas no se dieron cuenta --al menos ese día--. Algunas versiones indican que el cronista narró a distancia ese mismo año la Serie Mundial, la transmisión se cortó y Septién mantuvo su vibrante narración de ese partido solo con los cables que le llegaban desde Estados Unidos. Anécdotas como esas le dieron el mote de "Mago".
Así como el "Mago" narró partidos a ciegas o que ni siquiera existieron, los periodistas deportivos de ahora enfrentan a un escenario más complejo que les exige creatividad.
El deporte mundial está congelado y mientras los gobiernos no logren controlar los contagios por el coronavirus covid-19 nada rodará, nadie anotará, los cronómetros no se usarán y los jueces no podrán determinar ganadores. Para los aficionados los domingos serán como los lunes y los lunes por la noche serán como las madrugadas. Solo habrá repeticiones.
Si nadie juega fútbol en México, si Lionel Messi no hace genialidades, si Lewis Hamilton y la escudería Mercedes no tienen un tricampeonato que defender o si Giannis Antetokounmpo no tiene una quinteta que aplastar, entonces los cronistas, comentaristas y en general los medios especializados tienen pocas opciones.
"Ha sido todo un reto y nosotros tenemos que seguir generando información sí o sí", dijo Eduardo Espinosa, editor de La Afición, el suplemento deportivo del diario Milenio, en entrevista telefónica. "Todo el deporte nacional está parado en estos momentos. El gran golpe que ha sufrido el periodismo deportivo en México es con el fútbol, porque es el deporte que predomina y el que más se sigue".
A la Liga MX se le suman la segunda división y las categorías inferiores o la Liga Mexicana de Béisbol, que tendrá que encontrar una nueva fecha para arrancar. A nivel internacional las ligas de fútbol europeas, la Champions League, o bien, las ligas profesionales de Estados Unidos como la Major League Baseball (MLB) o la National Basketball Association (NBA) son otros ejemplos. El Campeonato de Wimbledon --tenis-- ya fue cancelado, al igual que las primeras carreras de la Fórmula 1 o los torneos de golf.
Claro que lo más preocupante para los periodistas es la postergación de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, la Copa América y la Eurocopa de Naciones, eventos para los cuales los medios preparan sus coberturas con mucho tiempo de antelación por el interés general que suscitan.
Pero la sofisticación de las telecomunicaciones, y los raudales de información difícilmente permitirían que alguien replicara las hazañas del "Mago" Septién. Gigantes del sector como ESPN o Fox Sports en México optaron por varios días --en lo que adaptaban sus producciones desde sus casas-- emitir únicamente repeticiones.
Ante este escenario, los medios deportivos que no tienen el poderío económico y la reputación de los medios norteamericanos recurren a otras estrategias para llenar los vacíos que habitualmente son cubiertos con la información diaria generada de partidos, conferencias y eventos. Ahora, esos espacios son cubiertos con reportajes especiales a partir de un dato histórico, una figura reconocida dentro del mundo deportivo, estadísticas o comparativas de las disciplinas en México y otros lugares.
Otra alternativa --de acuerdo con Espinosa-- es adaptar los contenidos entorno a la pandemia para darles un enfoque deportivo, tal como lo ha trabajado el suplemento deportivo mediante especiales sobre las consecuencias físicas o psicológicas que el confinamiento puede tener en los atletas; o bien, que puedan serle de utilidad a los lectores, como consejos sobre las actividades que pueden realizar desde sus hogares.
Claro que la complejidad para generar contenidos deportivos también radica en las particularidades de cada medio, reconoció René Umanzor, editor de Récord, uno de los principales diarios especializados en deportes a nivel nacional.
"Es un momento demasiado difícil porque no sabemos cuándo vamos a volver a tener deportes. En el caso de Récord, tenemos muy claro que a donde queremos ir es a hacer más llevadero el momento, es difícil pero tenemos que intentarlo porque al final es nuestra labor como periodistas", dijo en una llamada con Infosel.
Además de la información relacionada al tema de coyuntura y de cómo se vincula al deporte, y la generación de historias mediante sucesos pasados de relevancia, el rotativo especializado recurrió incluso a la creación de secciones nuevas para cubrir un espacio visiblemente mayor al de un suplemento dentro de un diario de circulación nacional.
De esa forma, las notas, reportajes y crónicas sobre las jornadas de fútbol local e internacional; o las entrevistas con la figura deportiva del momento, son suplidas por recomendaciones de cine, series y otro tipo de entretenimiento que los lectores pueden disfrutar desde casa. También con una cobertura de la pandemia que puede ser de utilidad para aquellos que fuera de los medios deportivos difícilmente se acercan a otros medios.
Este tipo de contenidos, no obstante, podrían no lograr el objetivo deseado en la medida en que el público al que van dirigidos suele ser con frecuencia especializado.
"Ese tipo de especiales no me genera nada porque son cosas que ya sé o ya vi", dijo Víctor Flores, aficionado, sobre a las retransmisiones de eventos deportivos de gran calado, como el Super Bowl o las finales de otras competiciones a las que las televisoras abiertas o de paga han recurrido para llenar tiempo al aire.
Como él, muchos aficionados optan por reducir su consumo de contenidos deportivos e incrementar el uso de servicios vía streaming u otro tipo de entretenimiento, hecho que para las televisoras y otras plataformas de contenido multimedia dedicadas al deporte, representa una desventaja.
Para las televisoras, la falta de actividad deportiva --principalmente de fútbol--podría representar también un golpe a sus ingresos por publicidad, su principal fuente de recursos, al ser los eventos deportivos un escaparate atractivo para los anunciantes.
"Me ha cambiado todo --el parón deportivo--, porque no estoy haciendo fútbol, entonces estoy planeando nuevos contenidos para aportar a la empresa", dijo a Infosel otra fuente que pertenece a la producción de contenidos en vivo para una cadena de televisión abierta con alcance nacional, y que prefirió el anonimato.
Sin programación atractiva en la televisión, entonces los contratos publicitarios difícilmente podrán cerrarse, o bien, afectarán de sobremanera a aquellas empresas que cierran acuerdos que ligan la cantidad a pagar con el rating, como sucede con Grupo Televisa (MX:TLEVISACPO), la mayor empresa de televisión de habla hispana a nivel mundial.
Una situación similar sucede con aquellos medios digitales en los que el flujo de información suele ser multimedia y renovado constantemente, y cuyos resultados están sujetos al cumplimiento de métricas.
"Tratamos de generar un plan de trabajo porque esto parece que por lo menos va a ser un mes o mes y medio más", explicó un editor de contenido deportivo para web de otra de las televisoras. "Son dos meses de ver cómo dar los números para no caernos".
La tarea de generar contenidos en tiempos de crisis sanitaria resulta más complicada en medida que los principales clubes deportivos --salvo excepciones—redujeron al mínimo el fluir de información, incluso para sus aficionados. Paradójicamente, esta situación ha generado una mayor colaboración entre medios.
Ejemplo de ello es el esfuerzo que la Liga MX realizó para lanzar un torneo en línea de FIFA 2020, en el que cada equipo es representado por alguno de sus jugadores y que será transmitido --vía digital o al aire-- no solo por Televisa y TV Azteca (MX:AZTECACPO), sino por las televisoras de paga Fox Sports e ESPN.
El torneo iniciará este viernes y culminará el 7 de junio, de acuerdo al anuncio de la Liga MX.
Mientras ello sucede, los periodistas deportivos continúan en la búsqueda de alternativas para generar sus contenidos, a la sombra de la incertidumbre laboral que la ausencia de eventos generaría con cada día que pasa.
"No se ha tocado el tema, no hemos hablado sobre eso. Las juntas que hemos tenido han sido para ver el manejo de información y esas cosas", explicó el editor de la plataforma web, en la que colaboran casi un centenar de personas. "Pero creo que si esto no es solo abril y se llega a extender otro mes, podría existir incertidumbre en todos".