BOGOTÁ, 7 mar (Reuters) - El presidente de Colombia, Iván Duque, pidió el jueves a la Corte Constitucional modificar una sentencia que prohíbe la fumigación aérea de cultivos de hoja de coca con el herbicida glifosato, y dijo que el Estado debe disponer de todas las herramientas para combatir la amenaza del narcotráfico.
El tribunal prohibió en 2017 fumigar con glifosato lanzado desde aviones los cultivos de hoja de coca -materia prima de la cocaína- por los daños a la salud y al medio ambiente, y condicionó una autorización a consultas previas con las comunidades y otros requisitos.
El actual gobierno considera que esa prohibición ha sido una de las principales causas del crecimiento de los cultivos a más de 200.000 hectáreas al cierre de 2017, la mayor cifra en más de una década según Estados Unidos.
"La aspersión no puede dejar de ser considerada como una herramienta efectiva. Nos hemos ido quedando sin las herramientas necesarias para enfrentar la más grande amenaza al orden constitucional en muchos lugares del territorio nacional", dijo Duque en una audiencia en la Corte Constitucional.
"Mi solicitud respetuosa es que haya una modulación de la sentencia, una modulación que considere estas graves afectaciones, una modulación que entienda que esta expansión de los cultivos realmente hace un daño tremendo al orden constitucional, al orden legal, al medio ambiente, a la seguridad territorial", explicó el mandatario.
Colombia, considerado como el primer productor mundial de cocaína, tiene una capacidad potencial para producir 1.379 toneladas métricas anuales, según las Naciones Unidas.
En los cultivos de hoja de coca y en la producción de cocaína están implicados grupos armados ilegales como disidentes de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que rechazaron un acuerdo de paz firmado en 2016, el Ejército de Liberación Nacional y bandas criminales con nexos con carteles mexicanos.
Duque afirmó que además de la fumigación aérea con glifosato, su gobierno mantiene la erradicación manual de cocales y planes de sustitución voluntaria.
Sin embargo, advirtió que mientras con la erradicación manual se destruyen entre dos y tres hectáreas al día, con la fumigación aérea, que es menos costosa y más segura para las Fuerzas Armadas, se eliminan entre 120 y 150 hectáreas diarias.
"Aquí no somos defensores de un prurito en función de un herbicida, no. Lo que queremos es una visión integral y no podemos renunciar a ninguna de las herramientas", concluyó.
En la audiencia también intervinieron ambientalistas y políticos que se oponen a la fumigación de cocales con el herbicida producido por Monsanto y que es utilizado en otras actividades agrícolas en el país.
La corte decidirá en los próximos meses si mantiene las restricciones a la fumigación aérea con glifosato o si hace cambios su sentencia previa.
<^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^ Diagrama que muestra la evolución de los cultivos de coca en la región Andina.
https://tmsnrt.rs/2UmpuZt
^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^> (Reporte de Luis Jaime Acosta Editado por Javier López de Lérida)