Por Nelson Acosta
LA HABANA, 24 feb (Reuters) - El Gobierno de Cuba, con problemas de liquidez, dio luz verde el martes a la venta de autos usados en dólares en un único concesionario en La Habana, un paso más hacia la dolarización de un segmento del sector minorista de la población.
La ineficiente economía doméstica está atravesando una crisis de liquidez debido a la implosión de la economía de su aliado Venezuela y al reforzamiento del embargo comercial que aplica el Gobierno de Trump.
Alrededor de un centenar de cubanos miraban unos 30 modelos de autos de segunda mano, en un país donde aproximadamente uno de cada 20 residentes posee un vehículo y cuyo promedio salarial es inferior al equivalente de unos 100 dólares al mes.
El gobierno cubano había publicado la semana pasada la lista de autos que incluyen elevados precios. Por ejemplo, un Peugeot (PA:PEUP) 301 automático (45.000 dólares), un microbús Maxus G10 (90.000) y un Renault (PA:RENA) Sendero (40.000).
"Por mi familia hago cualquier cosa. Y es una buena opción para mis hijos y esposa en La Habana", dijo rodeado de curiosos Yoan Orlando Milián, de 37 años, al volante de un Toyota (T:7203) Land Cruiser de 2011 que costó 80.000 dólares.
Milián, que vive entre Miami y La Habana, ha renovado la ciudadanía cubana y fue el primero en adquirir uno de los autos en venta luego de que acampó durante varios días en el concesionario situado en la exclusiva barriada de Miramar.
El gobierno cubano legalizó por primera vez la compra-venta de autos en el 2014 luego de la revolución cubana de 1959, aunque en pesos convertibles, una moneda local equivalente al dólar pero sin valor fuera de la isla caribeña.
Los autos nuevos y usados tenían un precio de más del 400 por ciento al valor de los originales de fábrica. Reinier Ramos, que llegó desde la central provincia cubana de Cienfuegos, dijo que estaba hace tres días en La Habana.
"Quiero un Geely de 35.000 dólares o un MG3 por 34.000", dijo en alusión a ambos autos de China.
"Estos autos deben ser los más caros del mundo", dijo un joven ingeniero agrónomo que trabaja para el Estado. ¿Tendremos oportunidad algún día de tener un auto?", dijo a Reuters observando los modelos desde la distancia. (Reporte de Nelson Acosta; reporte adicional de Marc Frank, Editado por Juana Casas REUTERS NAB JIC/)