Por Geoffrey Smith
Investing.com -- Un empresario ruso ampliamente considerado como un aliado clave del presidente Vladimir Putin admitió el lunes haber interferido en las elecciones de Estados Unidos, sólo un día antes de las elecciones de medio término que pueden cambiar el rumbo del país para los próximos dos años.
"Señores, hemos interferido, estamos interfiriendo e interferiremos", dijo en un comunicado Yevgeny Prigozhin citado por su equipo, acusado de dirigir una "fábrica de trolls" para influir en el resultado de las votaciones en varios países occidentales.
"Con cuidado, con precisión, de forma quirúrgica y como lo hacemos, como podemos", dijo Prigozhin, según AFP.
Prigozhin, respondía así a una petición de comentarios sobre un informe de Bloomberg en el que se afirmaba que Rusia estaba interfiriendo en las elecciones legislativas.
La declaración de Prigozhin da credibilidad a las antiguas acusaciones del Partido Demócrata sobre la injerencia rusa, principalmente en beneficio del Partido Republicano. El abogado especial Robert Mueller había concluido en 2018, tras una larga investigación, que, durante las elecciones presidenciales de 2016, Rusia había intentado dañar la campaña de la candidata demócrata Hillary Clinton, impulsar las posibilidades de su oponente Donald Trump y sembrar ampliamente la desconfianza en la democracia estadounidense. Trump y el Partido Republicano refutaron esas conclusiones.
Este año, Prigozhin se ha desprendido de sus inhibiciones para ser presentado como una figura influyente en la política del Kremlin. Fue noticia en septiembre al confirmar lo que muchos habían informado previamente, es decir, que había fundado el grupo de mercenarios Wagner que ha perseguido los objetivos de la política rusa desde Ucrania hasta la República Centroafricana, así como en Siria y Libia. El grupo ha reclutado activamente entre la población penitenciaria rusa este año para conseguir reclutas para la campaña en Ucrania.