Una coalición de familias afectadas por sobredosis de fentanilo ha presentado hoy una petición a la Representante de Comercio de EE.UU., Katherine Tai, en la que solicita una investigación sobre el papel de China en la epidemia de opioides sintéticos en Estados Unidos. La petición, presentada en virtud de la Sección 301 de la Ley de Comercio de 1974, pretende imponer al menos 50.000 millones de dólares en aranceles a las importaciones chinas como contramedida a la supuesta incapacidad del gobierno chino para frenar la exportación de precursores de fentanilo.
El grupo argumenta que China, como principal productor mundial de productos químicos, no ha tomado medidas suficientes para impedir la exportación de sustancias utilizadas para producir fentanilo ilícito, lo que contribuye a importantes costes económicos y humanos en EE.UU. Según un análisis de 2022 del Comité Económico Conjunto del Congreso, la crisis de los opioides ha costado a EE.UU. casi 1,5 billones de dólares en 2020, y las sobredosis de opioides sintéticos causaron casi 75.000 muertes sólo el año pasado.
La petición sugiere una serie de contramedidas comerciales, incluidos los aranceles propuestos y la prohibición de que los envíos chinos entren en EE.UU. a través de una regulación comercial conocida como de minimis, que actualmente permite que los paquetes de bajo valor entren en el país con una inspección mínima.
Nazak Nikakhtar, abogado que representa a las familias, subrayó que la cuestión entra dentro de las competencias legales del USTR, dado el importante impacto de la adicción al fentanilo en la mano de obra y la economía estadounidenses. Nikakhtar expresó su intención de ejercer presión económica sobre China para que actúe.
Andrea Thomas, una de las peticionarias cuya hija murió a causa de una píldora con fentanilo en 2018, expresó su esperanza de que la acción comercial propuesta evite más pérdidas de vidas al detener la exportación de precursores de fentanilo desde China.
El USTR tiene un período de 45 días para decidir si inicia una investigación basada en la petición. La presentación se produce cuando se acercan las elecciones presidenciales en Estados Unidos, en las que el fentanilo es un tema crítico. Tanto el expresidente Donald Trump como la vicepresidenta Kamala Harris han esbozado sus planteamientos para combatir la crisis del fentanilo.
El Gobierno de Biden ha atribuido la ralentización del ritmo de muertes por sobredosis a sus iniciativas de reducción de daños y de aplicación de la ley, y ha señalado la mejora de la cooperación antinarcóticos con China como un aspecto positivo de las, por otra parte, tensas relaciones entre Estados Unidos y China.
La petición del USTR representa un enfoque poco convencional por parte de las familias para abordar sus quejas relacionadas con la crisis del fentanilo. Jeff Moon, ex Representante Adjunto de Comercio de EE.UU. para Asuntos de China, describió la petición más como un esfuerzo activista que como una acción comercial tradicional.
Anteriormente, los sindicatos estadounidenses presentaron en marzo otra petición en la que solicitaban una investigación sobre las políticas chinas de logística marítima y construcción naval. China se opuso a la investigación, calificándola de infundada y contraria a la lógica económica. El USTR está llevando a cabo actualmente una investigación sobre ese asunto.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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