MÉXICO DF, 13 jun (Reuters) - El partido gobernante de México conservó casi con seguridad la escasa mayoría que tiene junto con sus aliados en la Cámara de Diputados tras las elecciones del fin de semana pasado, dijo el sábado un funcionario del Instituto Nacional Electoral (INE).
El Partido Revolucionario Institucional (PRI), del presidente Enrique Peña Nieto, el Partido Verde y el pequeño Partido Nueva Alianza (Panal) llegaron a los comicios del domingo con una leve mayoría de 251 asientos en la Cámara baja del Congreso, que cuenta con 500 escaños.
Resultados preliminares del INE mostraron que las tres fuerzas obtuvieron en conjunto más de 180 de los 300 distritos puestos en juego en la elección, los cuales, sumados a los curules que obtengan de los 200 que se distribuyen por la vía proporcional, serían suficientes para mantener la mayoría.
"Todo parece indicar que van a conservar su mayoría", dijo el funcionario del INE a Reuters, que habló bajo condición de anonimato.
El resultado final del INE sobre la distribución de los asientos en la Cámara debería ser divulgado el domingo, añadió.
Sin embargo el resultado aún podría sufrir cambios por recuentos o apelaciones, y si el Partido del Trabajo (PT (OTC:PTGCY)), una pequeña fuerza de izquierda, logra alcanzar el mínimo del 3 por ciento de los votos necesarios para entrar al Congreso, agregó el funcionario.
Un recuento inicial del INE mostró que el PRI y sus aliados habría ganado casi el 40 por ciento del total de los votos, alrededor de 2 puntos porcentuales por debajo del resultado que obtuvo en los comicios del 2012.
No obstante, su más cercano rival, el Partido Acción Nacional (PAN), de centro-derecha, habría reducido su cuota de apoyo en cinco puntos a sólo un 21 por ciento, con el voto fracturado por una mayor cantidad de partidos en esta elección y de candidatos independientes.
El PRI y sus aliados están a unos cuantos asientos de la mayoría en el Senado, que se renueva cada seis años y no fue a las urnas el domingo.
Después de haber cumplido la mayor parte de sus principales promesas legislativas, incluidas las reformas para poner fin al monopolio de petróleo del Estado y abrir el sector de las telecomunicaciones a la competencia, no se espera que Peña Nieto necesite tanto del apoyo del Congreso en sus últimos tres años en el poder.
Sin embargo, el Gobierno aún tiene algunos pendientes legislativos antes de los comicios presidenciales del 2018, incluyendo la reforma agraria y la reforma urbana.
La ley mexicana prohíbe al presidente buscar la reelección. (Reporte de Dave Graham. Editado en español por Noé Torres y Marion Giraldo)