Por Gabriel Stargardter
QUERÉTARO, MÉXICO, 27 feb (Reuters) - Cuando el súperastro brasileño de fútbol Ronaldinho firmó con el equipo mexicano Querétaro en septiembre, Olegario Vázquez Aldir, el nuevo propietario del club, dio un paso más hacia convertirse en el próximo magnate de medios en el país.
Si bien Ronaldinho, elegido dos veces mejor jugador del mundo por la FIFA, ya vio pasar sus mejores años, pero aún es uno de los futbolistas más glamorosos en México y ficharlo por 2 millones de dólares anuales fue un acierto para Vázquez Aldir, que usa el deporte para entrar al cerrado círculo de plutócratas.
Se espera que Vázquez Aldir, jefe en segunda generación de Grupo Empresarial Angeles (GEA) que aglutina medios, hoteles, hospitales y firmas de construcción, se quede con al menos una de las dos cadenas de TV abierta que el Gobierno licitará en marzo. urn:newsml:reuters.com:*:nL2N0TB08P
En caso de ganar, el empresario de 42 años se hará de una nueva vía para influir en la opinión pública y fortalecer su imperio de negocios.
Y como los equipos de fútbol venden sus derechos a las cadenas de televisión, Rondaldinho, de 34 años, podría ayudar a atraer espectadores y anunciantes a la nueva cadena de televisión, y permitir a Vázquez Aldir aprovechar el mercado de millones de fanáticos del deporte en Estados Unidos.
"Esta es una oportunidad inmejorable para nosotros", dijo Vázquez Aldir en una conferencia de prensa después de comprar al Querétaro.
Con la compra, Vázquez Aldir también elevó su propio perfil, como el magnate de las telecomunicaciones Carlos Slim, Emilio Azcárraga de Televisa TLVACPO.MX y Ricardo Salinas de TV Azteca AZTECACPO.MX , cuyos equipos de fútbol refuerzan sus imperios de medios y su influencia política.
Después de comprar los equipos León y Pachuca en 2012, Slim sacó sus partidos de la televisión abierta, controlada por el duopolio rival de Televisa y TV Azteca, para transmitirlos por sus canales en línea y vendió los derechos pagados a Fox Sports en México y Telemundo en Estados Unidos.
Vázquez Aldir, quien no quiso hacer comentarios para este reporte, ha dado pocos detalles sobre sus planes para el Querétaro.
Pero una fuente con conocimiento de la firma dijo que el empresario quería comprar un club de fútbol desde antes de que su unidad de medios GEA, Grupo Imagen, obtuviera su primera concesión de televisión abierta en el 2006. La compañía también opera el canal de noticias Excélsior TV.
"La cultura empresarial es fortalecerse como uno de los más grandes conglomerados empresariales de México", dijo María Elena Meneses, quien pasó tres años dentro de Grupo Imagen para observar a la compañía mientras hacia una investigación para su doctorado.
"Yo tengo la impresión que los medios de ellos les interesan para cabildear sus propios intereses empresariales", dijo.
¿REFORMA EXAGERADA?
Solamente dos compañías están compitiendo por la licitación que creará dos nuevas cadenas de televisión nacional. En la actualidad, Televisa y TV Azteca son propietarias de la mayoría de las concesiones de televisión local en el país.
La licitación es resultado de una reforma encabezada por el presidente Enrique Peña Nieto en los mercados de telefonía y televisión, dominados por Slim y Azcárraga.
Sin embargo, si Vázquez Aldir no gana la licitación, podría levantar preguntas sobre la reforma, supuestamente diseñada para quitar poder a los barones de los medios.
"Los Gobiernos de los últimos años han creado multimillonarios", dijo Gabriel Sosa Plata, analista de telecomunicaciones refiriéndose a los concesiones de telefonía ganadas por Slim, uno de los hombres más ricos del mundo.
"Es una especie de tragedia. Aquí en México las grandes compañías y millonarios son quienes van a determinar las reglas del juego", comentó.
Prodemex, el brazo constructor de GEA, se vio envuelto el año pasado en una controvertida licitación ferroviaria, cuyo fallo fue revocado luego de que una de las firmas integrantes del consorcio ganador, liderado por una empresa china, fue implicada en un conflicto de intereses que involucraba a Peña Nieto.
Vázquez Aldir, un fan de la música de marichi, está tratando de ampliar su negocio de televisión, aun cuando la industria se enfrenta a nuevas presiones con espectadores que usan proveedores como Netflix.
Pero en México, donde la penetración de Internet es de alrededor de un 40 por ciento y el gasto de publicidad del Gobierno es enorme, los canales de televisión dan a sus propietarios influencia política y les permiten cabildear para favorecer otros negocios.
Algunos analistas esperan que si Vázquez Aldir gana la licitación, seguirá el ejemplo de Televisa y buscará una alianza con un operador de telecomunicaciones. En 2011, Vázquez Aldir dijo que buscaría listar cada una de las unidades de GEA, pero que no tenía prisa.
"Ellos están en la cúspide de las grandes ligas", dijo una fuente que asesora a GEA en su estrategia de negocios. "No son una empresa pública y transparente (...) eso realmente es la próxima prueba".
(1 dólar = 14.95 pesos) (Traducido por Gabriela López; Editado en español por Javier López de Lérida)