¿Qué acciones son las mejores para comprar si está construyendo su cartera de jubilación? La respuesta a esta pregunta depende en gran medida de su interés por el riesgo y sus metas de jubilación.
Pero si usted es como muchos jubilados cuyo objetivo es preservar el capital y generar beneficios estables para financiar un estilo de vida cómodo durante sus años dorados, generalmente recomendamos comprar acciones de bajo riesgo que proporcionen dividendos en constante crecimiento.
Aplicando estos criterios de cribado, generalmente encontrará empresas de primera categoría con balances saludables, fuertes flujos de efectivo y un largo historial de pago de dividendos. Echemos un vistazo a tres acciones de este tipo que cumplen esos requisitos, y a qué las convierte en una sólida inversión a largo plazo para la mayoría de los jubilados.
1. Lockheed Martin (NYSE:LMT)
Las de Lockheed Martin no son el tipo de acciones que genera titulares a diario. Pero sin duda es uno de esos nombres que encaja muy bien en una cartera de jubilación a largo plazo.
La compañía aeroespacial y de seguridad paga un dividendo trimestral de 2,6 dólares por acción, lo que se traduce en una rentabilidad por dividendo anual del 3,06%, respaldada por los fuertes flujos de efectivo de la compañía y su negocio a prueba de recesión.
Durante la pandemia, Lockheed registró un nivel constantemente ascendente de ganancias, ventas y flujo de efectivo, respaldada en parte por los pagos progresivos acelerados del Departamento de Defensa, que luego se transmitieron a los proveedores.
En un momento en que la mayoría de las empresas dudan a la hora de proporcionar una orientación sobre las ganancias, LMT reportó un retraso de pedidos sin precedentes de 147.000 millones de dólares, lo que demuestra la estabilidad y asegura ingresos a largo plazo para sus inversores. Lockheed sigue operando a aproximadamente 14 veces su relación precio-beneficio, lo que indica que estas acciones no son caras y podrían ser una incorporación sólida a su cartera de jubilación. Las acciones de Lockheed Martin cerraron ayer en 346,41 dólares.
2. Merck & Company (NYSE:MRK)
Los proveedores de atención médica ofrecen servicios que siguen siendo necesarios incluso en una recesión. Además, en cuanto a las compañías farmacéuticas, los vaivenes económicos no suelen frenar el despliegue de nuevos medicamentos y dispositivos.
Acciones como las de Merck están bien posicionadas para no sólo vencer al mercado en una recesión, sino también proporcionar buenos rendimientos sostenibles. La compañía se está beneficiando actualmente del éxito de su fármaco contra el cáncer más vendido, Keytruda. Los analistas esperan que las ventas anuales de Keytruda alcancen los 20.000 millones de dólares en 2023, según FactSet (NYSE:FDS), generando más de un tercio de las ventas totales de la compañía.
Merck es también uno de los principales fabricantes de medicamentos que desarrollan terapias para combatir el Covid-19. Aunque su candidato a la vacuna no produjo resultados positivos, la compañía persigue agresivamente terapias para proporcionar una cura para los individuos infectados.
Una pastilla contra el COVID-19, actualmente en desarrollo con Ridgeback Biotherapeutics, ha reducido significativamente las infecciones por virus en sujetos después de cinco días de tratamiento, según ha mostrado un estudio que se encuentra en una etapa intermedia, según informó el Wall Street Journal la semana pasada.
Merck recientemente acordó comprar VelosBio Inc. por 2.750 millones de dólares para reforzar su línea de terapias contra el cáncer, y la empresa privada de biofarma OncoImmune por 425 millones de dólares para obtener una terapia potencial contra los casos graves de Covid.
Con un dividendo creciente y recompras de acciones, Merck es una buena apuesta a largo plazo para aquéllos que buscan pagos crecientes. Las acciones, que ayer cerraron en 76,26 dólares, reportan actualmente un beneficio del 3,49%, lo que se traduce en un dividendo trimestral de 0,65 dólares por acción tras una subida del 7% en noviembre.
3. Procter & Gamble (NYSE:PG)
Las acciones del gigante de los productos de primera necesidad Procter & Gamble son acciones de bajo riesgo ideales para una cartera de jubilación a largo plazo. P&G tiene un amplio historial de recompensar a sus inversores con plusvalías y pagos en constante crecimiento.
La compañía con sede en Ohio lleva aumentando su dividendo 64 años consecutivos. Con un rendimiento anual del 2,47%, P&G paga un dividendo trimestral de 0,79 dólares por acción tras subir un 6% en 2020. Durante la última década, sus acciones se han más que duplicado, incluyendo dividendos, ofreciendo a sus inversores una atractiva rentabilidad total.
A sus 21 años, la relación precio-beneficio a futuro de P&G está cerca de su cota más alta de los últimos cinco años. Pero el impulso de crecimiento de la compañía sugiere que las acciones del fabricante de productos fundamentales para el hogar como las toallitas de papel Bounty, las maquinillas de afeitar Gillette y el detergente para la ropa Tide hacen de ésta una apuesta segura para los inversores a largo plazo.
En enero, P&G aumentó sus previsiones de ventas y ganancias, afirmando que sus ingresos orgánicos crecerán hasta un 6% en el año fiscal 2021, un aumento con respecto a las previsiones anteriores de no más del 5%. P&G también considera que el beneficio por acción básico aumentará hasta en un 10%. Las acciones cerraron ayer en 128,56 dólares.
En conclusión
Incorporar sólidas acciones de dividendo a su cartera de acciones podría crear un flujo de ingresos constante en el que confiar durante la jubilación. Comience a construir lentamente su cartera de acciones cuando los precios de las acciones sean atractivos y los rendimientos sean elevados. Al llevar a cabo esta estrategia, seguirá obteniendo pagos en constante crecimiento, incluso cuando la economía esté en mal estado.