Las principales bolsas en el mundo operan con ganancias, tras conocerse que las dos mayores potencias económicas del mundo, EUA y China, han mantenido una llamada para rebajar las tensiones. Esto, después de las acusaciones de EEUU a China sobre la autoría del virus, y de la respuesta airada del gigante asiático.
Asimismo, los inversionistas evalúan el débil, pero esperado, reporte de empleo de EUA correspondiente al mes de abril. Los inversionistas se enfrentan a una difícil decisión, entre el optimismo que genera la reapertura de las economías cerradas para afrontar la pandemia del Covid-19 y el deterior significativo en las economías que ha dejado el confinamiento, además del riesgo de una recaída en los contagios.
El negociador comercial estadounidense, Robert Lighthizer, su homólogo chino, Liu He, y el Secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, han mantenido una llamada telefónica. Ambas Partes se han comprometido a seguir poniendo en práctica la primera fase del acuerdo comercial que firmaron el 15 de enero, pese a las últimas tensiones entre los dos países a raíz del origen del coronavirus.
Esto significa una relajación de las hostilidades que se estaban gestando entre Washington y Beijing después de que el presidente Donald Trump acusara a China de haber manejado mal el brote de coronavirus y amenazara con anular el pacto comercial bilateral entre las naciones.
En materia económica, como resultado de las medidas de confinamiento implementadas en EUA, provocaron el peor reporte del mercado laboral en su historia. En abril, se perdieron 20.5 millones de empleos (nómina no agrícola), por debajo de lo pronosticado (22 millones). Aunque se trata de la mayor pérdida de trabajos desde la Gran Depresión, gran parte de los empleos perdidos son temporales. La tasa de desempleo se triplicó para alcanzar 14.7%, también por debajo de lo esperado (16.0%). Con ello, se borraron todos los empleos creados en la última década. Aunque los salarios subieron, tanto a tasa anual (7.9%) como mensual (4.7%), esto se explica porque hubo una mayor caída de empleo con remuneraciones por debajo del promedio nacional. Es probable que incluso en posteriores revisiones, los datos sean todavía más negativos debido a las dificultades para recopilar la información por el tema de la pandemia del COVID-19.
Por su parte, el precio internacional del petróleo (WTI) opera con cierta estabilidad, después del retroceso de ayer y cotiza cerca de $23.70 por barril. Así, se encamina a su segunda semana consecutiva de ganancias tras los mínimos marcados en abril, a media que las restricciones de confinamiento por el coronavirus se van relajando en todo el mundo y ante las mejores perspectivas en cuenta a la demanda de crudo mundial debido a esto.
En México, la Inversión Fija Bruta se redujo en febrero -10.2% a tasa anual desestacionalizada (-8.6% con cifras originales). A su interior, los gastos en Maquinaria y equipo total cayeron 11.5% y en Construcción retrocedieron 8.7%. Por su parte, el consumo privado mostró una reducción anual de -0.5%, también en febrero. Por su parte, la producción total de vehículos ligeros en México se contrajo 99%, mientras las ventas al exterior bajaron 90%, un reflejo del cierre total que tuvieron las armadoras en el país como medida para enfrentar la pandemia del COVID-19.
El peso mexicano inicia la sesión alrededor de $23.75 spot, asimilando las noticias positivas sobre EUA y China. El débil dato del mercado laboral estadounidense en gran medida ya estaba descontado por los mercados financieros y como estuvo por debajo de lo esperado, la reacción inicial de la moneda mexicana es positiva.
Por el resto del día, el tipo de cambio podría fluctuar entre los $23.55 y $24.05 spot (el euro entre $1.080 y $1.087).