El temor a una segunda oleada de contagios de COVID-19 vuelve a golpear en la jornada de hoy a los mercados financieros, en particular a los activos de mayor riesgo.
La posibilidad de que la segunda ola del coronavirus pueda golpear aún más la economía mundial está pesando en el ánimo del mercado. El aumento de los casos, tanto en China como en EUA, preocupa cada vez más a los inversionistas, que temen que otro cierre económico esté cercano.
Pekín informó el fin de semana nuevos aumentos de casos nuevos de COVID-19, intensificando los esfuerzos por frenar un repentino rebrote del coronavirus en la capital china. El reciente brote se ha rastreado hasta Xinfadi, el mayor mercado de alimentos al por mayor de Asia que representa el 80% del suministro de productos agrícolas de Pekín, tanto de origen nacional como extranjero. En EUA, estados como Alabama, California, Florida y Carolina del Norte informaron de un aumento en los nuevos casos de coronavirus diarios. Texas y Carolina del Norte reportaron un número récord de hospitalizaciones relacionadas con el virus el sábado pasado.
Lo anterior está provocando caídas en las principales bolsas en el mundo e incitando la búsqueda de activos refugio como los bonos alemanes, del tesoro estadounidense, el oro y algunas monedas como el yen o franco suizo.
También contribuye a las caídas de hoy la intensificación de las protestas contra el racismo y la brutalidad policial, que comenzaron tras la muerte de George Floyd bajo custodia policial en Minneapolis el mes pasado. Las tensiones han aumentado aún más tras la muerte de Rayshard Brooks, un hombre negro asesinado por un policía blanco en Atlanta el viernes.
Por último, otro elemento que le juega hoy en contra de los mercados es que los datos económicos publicados en China apuntan a una recuperación lenta y difícil. La producción industrial de China aumentó por segundo mes consecutivo en mayo, pero la ganancia fue menor de lo esperado, lo que sugiere que la economía sigue luchando para volver a la normalidad tras la crisis del coronavirus (4.4% vs. 5.0% pronosticado). Por su parte, las ventas al menudeo y la inversión en activos fijos siguieron contrayéndose en el quinto mes del año, apuntando a un rebote desigual y posiblemente más prolongado en otros sectores.
El precio internacional del petróleo también está resintiendo la incertidumbre de un posible rebrote de COVID-19. La recuperación de la demanda de petróleo está programada como algo que será un proceso prolongado en el tiempo. Una nueva ola de casos aumentaría las preocupaciones de que una recuperación de la demanda pueda llevar aún más tiempo de lo que se pensó inicialmente. El WTI se ubica alrededor de 35.40 dólares por barril.
Por otro lado, hoy se lleva a cabo el encuentro del primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, para discutir el camino a seguir en las negociaciones del Brexit antes de la fecha límite del 1 de julio. Existe muy escepticismo sobre la posibilidad de que ambas partes encuentren un avance en las negociaciones estancadas, especialmente sobre una posible extensión del período de transición, que expira a finales de año. Esta prórroga debe acordarse antes del 1 de julio.
La búsqueda de los inversionistas a refugiarse nuevamente en activos defensivos está afectando al peso mexicano, el cual vuelve a presionarse hacia $22.60, en línea con la mayoría de las monedas de economías emergentes.
Por el resto del día, el tipo de cambio podría fluctuar entre los $22.35 y $22.75 spot (el euro entre $1.122 y $1.128).