Con el objetivo de tratar de calmar las tensiones entre ambos países, el gobierno chino anunció que eximirá de aranceles a 79 productos que son importados desde Estados Unidos.
Según la lista publicada por el Ministerio de Finanzas de China, algunos de los bienes liberados del arancel son las plaquetas de silicio utilizadas en la electrónica, minerales indispensables en la alta tecnología y desinfectantes de uso médico.
A partir del 19 de mayo, los productos incluidos dentro de esa lista no deberán pagar la tarifa aduanera adicional por el lapso de un año.
De esta manera, la administración de Xi Jinping le quiere demostrar a Estados Unidos que China continuará con la tregua comercial alcanzada en enero de este año, e incluso quiere iniciar las negociaciones de cara a una “fase dos” del acuerdo entre ambas partes.
Cuando comenzó el 2020, los mercados se encontraban en máximos históricos y eran optimistas debido a la mejora en las relaciones entre el gigante asiático y la potencia norteamericana. Luego de casi dos años de una guerra arancelaria, ambas naciones habían empezado a dejar sus diferencias de lado y optaron por poner fin al conflicto económico.
Sin embargo, apenas cuatro meses después, con la economía global en una recesión histórica y con todo el planeta siendo seriamente afectado por la pandemia del coronavirus, la postura del presidente estadounidense, Donald Trump, respecto a China volvió a ser negativa.
En una conferencia de prensa que brindó hace unas semanas en la Casa Blanca, Trump llegó a sugerir la posibilidad de sancionar económicamente a China por su forma de manejar los comienzos del brote de Covid-19.
“Estamos haciendo investigaciones muy serias y no estamos contentos con el manejo de China de toda esta situación. Creemos que podría haberse detenido desde el principio y rápidamente, de esa manera no se habría extendido por todo el mundo”, opinó el presidente de Estados Unidos. Opinó que gran parte de los problemas económicos de la pandemia se hubieran evitado si China hubiese sido más transparente.
El argumento de Trump iba en la misma línea que un medio de comunicación alemán, que le exigía al gobierno chino que le pague 160 mil millones de dólares a Alemania en forma de compensación por los daños económicos causados. “En el caso que China se haya equivocado de forma inocente, fue un error y ya está. Pero si ellos tenían conocimiento y responsabilidad, debería haber consecuencias”, expresó el mandatario y luego advirtió: “Todavía no hemos determinado la cantidad de dinero que le vamos a pedir, pero será mucho más que 160 mil millones”.
Ante estas amenazas que llegaron desde occidente, China, en lugar de responder a las críticas a la defensiva y escalar aún más las tensiones con los Estados Unidos, prefirió ceder un poco más para contar con una economía un poco más abierta para que la actividad económica del país asiático vuelva a la normalidad lo antes posible.