El Ministerio de Hacienda (MH) logró canjear US$529 millones entre las subastas del jueves y viernes. Los títulos que tuvieron mayor apetito fueron los que vencen en el segundo semestre del 2019 y todo el 2020. De esto se extraen varios puntos importantes: 1) hay señales de que el mercado está dispuesto a negociar con el MH en función de las condiciones que se ofrezcan, y 2) el mercado estaba atento principalmente por los vencimientos de más corto plazo, es decir, aquellos que vencen entre noviembre 2018 y febrero 2019, no obstante, no se presentaron ofertas de canjes para estos.
Dicho lo anterior, prevemos que las alertas de presiones de liquidez sobre el Gobierno en el corto plazo siguen en pie, por lo que los anuncios de los contratos de colocación serán claves para el Gobierno.
Por otra parte, la Sala Constitucional anunció que dará su respuesta respecto a las consultas sobre el proyecto de la reforma fiscal a más tardar el 26 de noviembre. Con esto, el mercado tiene una información relevante sobre el rumbo de la reforma fiscal, que ha sido una fuente alta de incertidumbre en las últimas semanas. En este momento, mantenemos nuestro escenario base, el cual consiste en que la Sala Constitucional aceptará la reforma si se aplican ciertas condiciones, como acatar el criterio de la Corte Suprema de Justicia (ver: Costa Rica: el rumbo del balance fiscal y la reforma).
Al mismo tiempo, los bonos internacionales de Costa Rica han materializado la incertidumbre del trámite de aprobación de la reforma fiscal y las presiones de liquidez del Gobierno. En ese sentido, no solo se trata de un ajuste fiscal sino también de un rol transcendental del Gobierno para restablecer la confianza en los mercados.
En informes anteriores, hemos sostenido que la reforma fiscal no garantiza una reversión inmediata de los agentes económicos, sino que esta se dará de manera gradual con mayor acento en los mercados internacionales.