Por Nathan Pincheira. Si bien hemos visto aumentar las probabilidades de recortes de la TPM en el corto plazo, no estimamos sean de manera urgente.
El INE informó que el IPC de octubre aumentó 0,2% m/m, por debajo de las expectativas. Con esto, el índice acumuló un alza de 2,9% en lo que va del año y 2,8% en doce meses, ubicándose en la parte baja del rango meta del Banco Central por primera vez desde enero del 2014.
Ocho de las doce divisiones mostraron alzas, destacándose transporte y vivienda. Llamó la atención la caída de la división alimentos, ya que estacionalmente registra alzas durante octubre y era esta la situación que mostraban los precios recogidos desde ODEPA.
En términos subyacentes, el IPCSAE avanzó 0,2% mes contra mes, acumulando un incremento de 2,7% en lo que va de 2016 y 3,2% en doce meses. Desagregando, nuevamente fue el componente de bienes el que evidenció la menor variación (0,0% m/m), mientras que servicios aumentó 0,3% mes contra mes. A nuestro entender, esto será de vital importancia en la evaluación que el consejo del BC realice del dato, ya que la trayectoria de los bienes ha estado ligada a movimientos cambiarios, los cuales no causarían (necesariamente) reacciones de política monetaria. El índice de difusión (calculado por nosotros como el porcentaje de bienes que aumentó de precio) llegó a 50% de la canasta, por debajo de lo evidenciado en 2014 y 2015 (63% y 62%, respectivamente) y del promedio acumulado en el año (54%).
Para noviembre pronosticamos un aumento del IPC entre 0,0%-0,1% m/m, lo que en conjunto con una variación nula en diciembre, mantendría la inflación interanual en 3%. En enero, el indicador podría bajar hasta 2,5% a/a, producto de una elevada base de comparación provocada por el alza del impuesto de timbres y estampillas a comienzos de año.
Si bien hemos visto incrementadas las probabilidades de observar recortes de la TPM en el corto plazo, no estimamos éstos se realicen de manera urgente. El aspecto comunicacional jugaría un rol importante ya que, hasta el momento, el sesgo es neutral y descartamos que haya una baja antes de modificarlo. Considerando la evaluación cautelosa que hicieron sobre el IPC de septiembre, la magnitud de la sorpresa de octubre (0,1 pp) y la lectura sobre los indicadores subyacentes, especialmente el de Servicios SAE, no vemos más elementos “pro recorte de tasa inminente”. Finalmente, importante es señalar que esto sólo se relaciona a la urgencia de los recortes y no a la necesidad de ellos, ya que seguimos proyectando la TPM se ubicará 50 pb por debajo de su nivel actual en los próximos 12 meses.