El sector energético operó de manera constante cuando el pico en los precios de la gasolina por las preocupaciones por el huracán Harvey ayudó a compensar las pequeñas pérdidas en el crudo.
Los metales preciosos tuvieron una semana tranquila con el oro intentando romper el nivel de resistencia clave mientras se esperaban noticias de la reunión anual de bancos centrales en Jackson Hole.
Sin embargo, una vez más, la mayor parte de la acción se produjo en los metales industriales. El índice de metales industriales de Bloomberg, liderado por el zinc y el aluminio, alcanzó el nivel más alto desde diciembre de 2014 y ahora ha aumentado en 8 de las últimas 10 semanas.
Los precios de la gasolina subieron a medida que las refinerías de la costa del Golfo comenzaron a detener las operaciones antes de la llegada del huracán Harvey, prevista para el último viernes. El primer huracán golpeó la costa de Texas por primera vez en una década arrojando más un metro de lluvia en las zonas más expuestas y esto impulsó el precio de la soja y el algodón debido a preocupaciones por las cosechas.
El azúcar se recuperó ya que se redujeron las posiciones cortas casi récord del fondo, en la respuesta a las noticias de que el gobierno brasilero impondría un impuesto del 20 % sobre las importaciones del etanol que exceden la cuota anual. Esto soportaría la producción nacional de etanol, desviando así la caña de azúcar de la producción de edulcorante.
Los futuros de diciembre del maíz CBOT -y en espacial el trigo- alcanzaron los mínimos de la vigencia del contrato antes que la búsqueda de oportunidades soportara una recuperación de las condiciones de la sobreventa. La prima del trigo sobre el maíz se recuperó después de colapsar durante la derrota del mes pasado.
La recuperación en los metales industriales, que se extendió aun más, es esencialmente por China. La búsqueda del gigante asiático para cerrar fábricas de fundición de alta contaminación para reducir la contaminación atmosférica ha sido el desencadenante de la subida de un mes en los metales, especialmente el aluminio y el zinc.
La combinación del recorte en la oferta y la demanda que se mantiene contribuye al aumento especulativo de la negociación en los mercados de futuros en China y el resto del mundo.
El trading especulativo en China es abundante, y una vez más, los reguladores se han visto obligados a intervenir e introducir medidas, como la reducción de los límites de las posiciones y mayores márgenes a los efectos de reprimir el trading especulativo, al tiempo que instan a los inversores a ser cautelosos y a tener un comportamiento racional.
En tanto, el cobre disfrutó del viento de cola de la recuperación y alcanzó el máximo de casi dos años en los mercados de Nueva York y Londres. Los fondos que especulan con precios más altos en el metal rojizo de alto grado ahora tienen la mayor exposición desde que comenzaron los récords en 2006.
El aumento de la producción y la caída de los inventarios mantuvieron al crudo WTI cerca de los 48,50 dólares el barril durante el último mes. En lo que va de agosto, el rango de negociación se ha reducido a entre 48,50 dólares el barril al alza y la media móvil de 50 días a la baja, actualmente en 46,70 dólares.
Sin embargo, a medida que nos acercamos al mes de septiembre, el riesgo/beneficio parece estar cada vez más inclinado a la baja. Una ruptura al alza podría permitir que el mercado volviera a los 50 dólares el barril, lo que desencadenaría una mayor actividad de cobertura de los productores estadounidenses. En cambio, una ruptura a la baja podría desencadenar una cuarta ola de ventas de los fondos que poseían la mayor posición larga neta combinada en los crudos Brent y WTI desde el 14 de marzo.
El comportamiento estacional también debe considerarse, con un pico del mercado normalmente visto durante la primera semana de septiembre, antes de que el mercado entre en la temporada de baja demanda.
El mayor riesgo para este supuesto caso es el peor escenario en Venezuela y la introducción de sanciones por parte de los EE.UU. destinadas a castigar al gobierno, mientras el presidente Nicolás Maduro sigue minando el derecho del pueblo venezolano a la libre determinación.
Cualquier acción que reduzca aún más la capacidad de Venezuela para exportar su crudo podría proporcionar algo de soporte a corto plazo.
Crudo WTI
Fuente: DIF Markets
Respecto a los metales preciosos, el oro pasó una semana tranquila pero nerviosa, operando dentro de un rango relativamente ajustado entre los 1.280-1.295 dólares la onza. El fracaso -hasta ahora- de romper de forma sostenida por encima del máximo del año ha dejado preocupados tanto a los fondos de cobertura como a los traders de que una corrección podría seguir.
Sin embargo, hasta ahora el mercado se ha mantenido con el soporte, casi como de costumbre, por las declaraciones y comentarios del presidente de los EE.UU. La amenaza de Donald Trump de cerrar el gobierno a menos que se encuentren fondos para construir un muro fronterizo con México ayudó a evitar que las acciones y el dólar se recuperaran.
Los discursos del viernes de la presidenta de la Fed, Janet Yellen, y del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, en la reunión anual de banqueros centrales en Jackson Hole (Wyoming) también ayudaron a mantener el oro dentro del rango, ya que el mercado esperaba pistas sobre la velocidad de ajustes monetarios en los EE.UU. y en la Eurozona.
El panorama técnico para el oro sigue siendo bastante claro. Una ruptura sostenida por encima de los 1.295 dólares la onza del spot probablemente lo impulse al alza, mientras que una ruptura por debajo de la tendencia alcista desde julio conlleva el riesgo de, una vez más, ver recortes en las posiciones largas y que el precio sufra en consecuencia.
El mercado se ha mantenido bien la semana pasada a pesar de la imposibilidad de romper al alza. Esto significa que los inversores siguen buscando diversificación y, en algunos casos, un refugio seguro en medio de la incertidumbre sobre la dirección de otras clases de activos, particularmente sobre las acciones. Uno de los mayores riesgos para el potencial alcista del oro proviene de una elevada y cada vez más vieja posición larga del euro frente al dólar. Cualquier reducción en estas apuestas podría enviar el dólar al alza y, con eso, los metales preciosos a la baja.
Una fluctuación por encima de los 1.295 dólares la onza podría ver al oro intentar alcanzar el máximo de los EE.UU. después de las elecciones de 1.337 dólares la onza. Por debajo de los niveles de retroceso técnicos en 1.280 dólares apuntaría a los 1.264, seguido de los 1.253 dólares la onza.
Oro spot
Fuente: DIF Markets