El índice dólar DXY cerró la jornada con una pérdida de 0.8%, lo que implica el mayor retroceso diario desde el 07 de mayo, frente a la expectativa de que la Fed retrase el retiro de sus estímulos monetarios por una posible desaceleración económica mundial impulsada por la aparición de una nueva cepa de Covid-19 en Sudáfrica. En contraste, el euro se apreció con fuerza, en 1%, operando alrededor de $1.132 unidades en el mercado spot. Por su parte, prácticamente todas las monedas emergentes terminaron el día con pérdidas. En particular, el peso mexicano fue la tercera más depreciada durante el día, al registrar una pérdida de 2.1% respecto al cierre previo, que equivale a 44.2 centavos, cotizando en torno a las $22.00 unidades frente al dólar, en el mercado interbancario a las 2 de la tarde. Tocando un mínimo en $21.64 y un máximo en $22.15 unidades, durante la sesión.
Mas temprano, la Organización Mundial de la Salud nombró a la nueva variante de COVID-19 con 32 mutaciones, como Omicron y la catalogó como ‘preocupante’, siendo esta la quinta variante en recibir esta designación. Hasta el momento, se sabe poco de la nueva cepa, pero los científicos dijeron que tiene una combinación inusual de mutaciones y puede evadir las respuestas inmunitarias o hacer que el virus sea más transmisible. Según información, se tienen registrados 10 casos repartidos en tres países diferentes: Botswana, Sudáfrica y Hong Kong. Ante ello, los precios del petróleo se desplomaron 12% y los rendimientos de la deuda del Tesoro de EE.UU. registraron su caída más pronunciada desde que comenzó la pandemia.
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