El peso mexicano se deprecia hacia $20.10 spot, con los operadores asimilando una cifra de inflación en EUA que se aceleró en septiembre. Por el resto del día el tipo de cambio podría fluctuar entre los $19.95 y $20.18 spot (el euro entre $0.961 y $0.971)
Los precios al consumidor en EUA siguen dando señales de resistencia, al superar expectativas en septiembre. En términos mensuales, los precios subieron 0.4%, el doble de lo pronosticado. Con ello, la tasa anual se modera un poco a 8.2%, por arriba del 8.1% esperado. Los mayores incrementos se dieron en vivienda, alimentos y servicios médicos. Por su parte, el rubro subyacente, aquel que excluye bienes volátiles como energéticos y agropecuarios, también quedó por arriba de lo estimado con un avance mensual alto de 0.6% (el promedio de variación en los últimos diez años en este mes es de 0.20%). A tasa anual subió a 6.6%, desde el 6.3% previo, un máximo de 40 años.
Estos datos unidos a la fortaleza que sigue mostrando el mercado laboral estadounidense dan margen a la Fed para seguir manteniendo una actitud agresiva. Así, la aceleración en la inflación confirmaría los planes del banco central estadounidense para un alza de 75 puntos base en su reunión de política monetaria de inicios de noviembre.
La subida de los precios subyacentes sugiere que la inflación será probablemente mucho más fuerte en los próximos meses de lo que los mercados esperaban en un principio, lo que aumenta el riesgo de que la Fed no sólo sea mucho más agresiva con las subidas de tasa, sino que los mantenga alta más tiempo.
Al igual que lo que se observó en septiembre pasado, este reporte de precios puede provocar un nuevo tramo bajista adicional en la mayoría de los precios de los activos de mayor riesgo.
Por otro lado, las minutas de la última reunión de la Reserva Federal (Fed) publicadas ayer confirmaron que el banco central estadounidense tiene intención de mantener alta la tasa de interés debido a una inflación inaceptablemente elevada. Aunque algunos de sus miembros también temen que las subidas sean excesivas, por lo que sería importante calibrar el ritmo de las alzas para mitigar los riesgos.
Los inversionistas están pendientes igualmente de lo que ocurra en Reino Unido. Mañana, el Banco de Inglaterra decide si deja finalmente de comprar bonos, como estaba previsto, o si extiende su intervención lanzada el pasado 28 de septiembre, algo que le están pidiendo las entidades financieras para evitar más caídas de los gilts. La situación es complicada y ya se habla de un enfrentamiento entre el banco central y el gobierno británico. Además, aumenta la especulación de que el gobierno de la primera ministra Truss está discutiendo reconsiderar la mayoría de las acciones que buscaba implementar en su presupuesto de emergencia anunciado en septiembre pasado.
Este jueves se publican más resultados después de que ayer Pepsi (NASDAQ:PEP) anunciara unas cifras mejores de lo esperado y a la espera de que mañana viernes comuniquen las suyas los grandes bancos de Estados Unidos (JP Morgan (NYSE:JPM), Morgan Stanley (NYSE:MS), Citigroup (NYSE:C) y Wells Fargo (NYSE:WFC)). Hoy se han conocido las cifras de BlackRock (NYSE:BLK) (caen los ingresos y las utilidades, pero supera expectativas) y las de Delta Airlines (NYSE:DAL) (ha adelantado que espera obtener también utilidades en el último trimestre del año ya que los viajes de ocio y los de negocios siguen recuperándose).
En Alemania, se ha dado a conocer el dato definitivo de la inflación correspondiente al mes de septiembre, que escaló a un récord del 10%, frente al 7.9% registrado en agosto, lo que representa el mayor encarecimiento del coste de la vida desde la reunificación del país.
Respecto al petróleo, el precio de referencia WTI se mantiene cerca de los 88 dólares por barril, prácticamente sin cambios respecto al día de ayer. La Agencia Internacional de la Energía (AIE) ha revisado a la baja sus previsiones sobre la demanda de petróleo para este año, y en mayor medida para 2023, informando que la reciente decisión de la OPEP+ de reducir su producción de crudo, puede acabar decantando el mundo a la recesión.
Las principales bolsas en el mundo operan con resultados mixtos, con la inflación de EUA amenazando con arraigarse y abriendo la puerta a subidas agresivas de la tasa de fondeo.