Este va a ser un artículo incómodo, pero es mi responsabilidad explicar el concepto y tomar nota de lo que sucede en esos casos.
En infinidad de ocasiones, las personas cuando oímos la palabra “ludopatía” la vemos como un auténtico problema, como una enfermedad o como una cosa que les pasa a no sé quién. Pues bien, están en lo cierto, puede afectar a cualquiera, es una enfermedad, y efectivamente es un auténtico problema.
¿Qué es la ludopatía?
La ludopatía consiste en un trastorno en el que la persona se ve obligada, por una urgencia psicológicamente incontrolable, a jugar y apostar de forma persistente y progresiva, afectando de forma negativa a la vida personal, familiar y vocacional./../
La ludopatía se caracteriza fundamentalmente porque existe una dificultad para controlar los impulsos, y que en cierto sentido tiende a manifestarse en practicar, de manera compulsiva, uno o más juegos de azar. Puede afectar en la vida diaria de la persona que se ve afectada por esta adicción, de tal forma que la familia, el sexo o incluso la alimentación pasa a ser algo totalmente secundario. Por todo ello, no se debe de confundir la ludopatía con un vicio, ya que en estos casos nos encontramos ante una grave enfermedad crónica, una adicción.
*Referencia Wikipedia
Pues eso, que es un auténtico problema. Los que nos dedicamos a esto le vemos similitud con el trading, supongo: factor psicológico, apostar, afectación personal, descontrol de los impulsos, etc. No voy a hacer un desglose terapéutico del cómo podemos remediar esta “adicción”, pero me daré por satisfecho si tan solo al leerlo por quien lo haga, las pupilas se dilatan y la curiosidad nos visita.
Hace unas semanas, un amigo mío que se dedica profesionalmente a la industria del trading me comentó una circunstancia que es, precisamente, la que me hizo hacer disparar mis alarmas. Más o menos vino a referirme que se encontraba cada día más con “futuros” traders o no tan futuros puesto que llevaban ya un par de años en esto, que se acercaban al mercado y a la elección del broker sea cual fuera pero con la única premisa de que el darse de alta, tan solo querían prontitud.
Lo explico de otra forma. Lo que marcaba la diferencia y saber decidir sobre que broker escoger, era darse de alta con el que más rápido lo hiciera. No importaba en absoluto las garantías legales o constitutivas del broker y en qué mercado estaban regulados, si es que lo estaban. Lo que les importaba era la prontitud.
Me quedé, permitirme la expresión, “acojonado”. Es decir, que si te puedes dar de alta en un broker en un santiamén con la tarjeta de crédito o skrill o como sea, pero rápido, es más interesante y decisivo que si te piden documentación, recibos domiciliados, carnets de identidad y demás. Lo importante es el “ya”.
Mi pregunta fue casi instintiva: ¿pero sabiendo que lo pueden perder en muy poco tiempo, no se interesan por saber si es un “chiringuito o no?
La respuesta fue inmediata y sincera: NO, no les importa un carajo.
Luego por tanto, ahí vi de forma descarada que lo que había detrás de esas personas era ludopatía.
Llevamos tiempo tratando y conociendo a muchos traders pero os puedo asegurar, como experto en personalidades en las inversiones mediante el enneagrama, que eso no va de perfiles de inversores, eso va de desespero, de frustración, de problemas personales y de saber poco del mundo de las inversiones. Habrán que estén en desacuerdo conmigo, pero si tan solo lo piensan y sirve para que de salida no abran una cuenta con tanta premura y sin saber más sobre lo que abre con dinero real, ya me quedo más tranquilo.
En serio, es una auténtica aberración abrir una cuenta sin saber lo que abres o lo que es realmente. Si te dejas llevar por la ludopatía en el trading, es solo cuestión de tiempo que pierdas todo lo que pusiste y que vuelvas a perderlo de nuevo si no pones remedio.
Lo dicho: que la ludopatía no se apodere de tu dinero. No tengas prisa.