Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
Septiembre es un mes intenso. Para los inversores, los movimientos de los precios de los activos vendrán determinados por las decisiones de los bancos centrales sobre los tipos de interés, los informes de empleo y las elecciones. Esta semana no hay anuncios de política monetaria, pero los informes de inflación y sobre el gasto de Estados Unidos y el Reino Unido determinarán las expectativas de las reuniones de la Reserva Federal y el Banco de Inglaterra de la semana que viene. La Reserva Federal cree desde hace tiempo que los elevados niveles de inflación son transitorios, pero cuanto más tiempo siga alto el IPC, menos confianza tendrán los banqueros centrales y los inversores en que las presiones sobre los precios vayan a relajarse mucho. El informe de ventas minoristas del jueves también será importante tras la sorprendente cifra de empleo no agrícola de la semana pasada. Si el gasto cae por segundo mes consecutivo, la tercera vez en las últimas cuatro, los inversores pospondrán sus expectativas de un anuncio de tapering de septiembre a noviembre — algo de lo que ya se está hablando.
El martes se publicarán las cifras del mercado laboral del Reino Unido, seguidas de las cifras de inflación del miércoles y del dato de ventas minoristas el viernes. Según los PMI, los sectores manufacturero y de los servicios registraron un fuerte crecimiento del empleo en agosto y una subida de los precios. Unos datos más sólidos no sólo deberían traducirse en optimismo para el Banco de Inglaterra, sino que también podrían animar al banco central a acelerar los planes de reducción de la deuda. Según una encuesta reciente de Reuters, los economistas creen que el Banco de Inglaterra subirá los tipos antes de lo previsto. Con la eliminación de las restricciones del COVID-19 en la mayor parte del Reino Unido, se espera que la economía crecerá un 2,5% este trimestre y un 1,5% el próximo.
Aparte de estos informes, la inflación de Canadá, el empleo de Australia y el PIB de Nueva Zelanda serán cifras importantes a tener en cuenta. Las tres divisas vinculadas a las materias primas subieron este lunes. La situación del COVID-19 en Australia sigue siendo sombría. El estado más poblado de Australia, Queensland, en el que se encuentra Sídney, podría volver a bloquearse tras un nuevo grupo de casos. Este fin de semana, los nuevos contagios diarios registraron nuevos máximos históricos. Gran parte del país ha estado bajo confinamiento estricto durante los dos últimos meses y las consecuencias económicas de estas restricciones aparecerán en los datos al igual que el informe de empleo de esta semana, que se espera indique importantes pérdidas de empleo.
El primer ministro de Nueva Zelanda ha ampliado el confinamiento de Auckland hasta el 21 de septiembre para evitar la aparición de nuevos casos. Aunque las cifras del PIB del segundo trimestre deberían ser buenas, el índice PMI manufacturero, que es una medida más concisa de la actividad económica neozelandesa, debería ser más débil. El dólar canadiense ha subido gracias al petróleo, que cerró por encima de 70 dólares por primera vez desde el 3 de septiembre. El informe del mercado laboral del viernes también fue robusto, pero los datos de inflación de esta semana podrían ser débiles.
Los 10 eventos más importantes a vigilar esta semana en el mercado de divisas son los siguientes:
Martes
- Informe de empleo del Reino Unido
- Índice de precios al consumo de Estados Unidos
Miércoles
- Ventas minoristas y producción industrial de China
- Índice de precios al consumo del Reino Unido
- Índice de precios al consumo de Canadá
Jueves
- PIB del segundo trimestre de Nueva Zelanda
- Informe de empleo de Australia
- Ventas minoristas de Estados Unidos
Viernes
- Ventas minoristas del Reino Unido
- Índice de confianza de los consumidores de la Universidad de Michigan de Estados Unidos