Ayer, nos centrábamos en el dólar. Hoy, nos centraremos en el euro, a la espera del informe de empleo no agrícolas de hoy (se ha publicado minutos despúes del artículo), que se publica un día antes de lo habitual debido a la festividad del Día de la Independencia de Estados Unidos.
La moneda única va camino de ampliar su mayor repunte en más de dos años. Una infinidad de indicadores reflejan la creciente confianza entre los inversores en la respuesta de la región al coronavirus.
Además de que el euro disfruta de su mayor repunte de los dos últimos meses frente al billete verde, el mercado de opciones indica que los traders son optimistas y sugiere que el avance de la moneda, lejos de haber terminado, probablemente se ampliará los próximos tres meses. También impulsa las previsiones de un aumento sostenido del valor de la moneda única la caída de la tendencia bajista hacia el euro en relación con el yen, que se sitúa en su nivel más bajo desde enero.
Esto es un indicio de que los inversores tienen más fe en la capacidad de los Gobiernos de la zona euro para proteger a sus ciudadanos frente a una segunda oleada, o la primera oleada en curso, del virus. Este punto de vista crea una perspectiva para las inversiones globales que se desvían hacia Europa, a expensas de otras economías, incluido Estados Unidos.
Los traders también están apostando a que la Reserva Federal tomará el control de la curva de rendimiento, acumulando posiciones en futuros de bonos a 5 y 10 años. El rendimiento de los bonos a cinco años se desplomó a mínimos históricos a la espera de las actas de la reunión de junio de la Fed.
El control de la curva de rendimiento es una herramienta para estimular la economía, si no bastan con recortar los tipos a corto plazo a cero. El objetivo de la Fed apunta a tipos más bajos a largo plazo y compra bastantes bonos a largo plazo para garantizar que el rendimiento de la curva siga siendo bajo, lo que evita que los tipos de interés suban por encima de su nivel objetivo.
No es sólo el mercado de opciones lo que está mostrando el valor alcista del euro. El mercado al contado está enviando su propio conjunto de señales de que el euro está a punto de encontrar un nuevo lugar entre los inversores en divisas.
El euro está golpeando contra la parte superior de una bandera descendente en desarrollo que ha tardado tres semanas en formarse. Aunque la caída que se muestra en el gráfico puede parecer bajista, es un componente esencial que revela una dinámica oculta que la hace especialmente alcista.
Normalmente, los precios descienden porque más traders se convierten en vendedores. Dentro de la bandera, incluso los vendedores son compradores. Simplemente están recogiendo ganancias tras el repunte anterior —subió un 5% en sólo dos semanas—, la mayoría de las cuales incluyeron un repunte de ocho días de duración, su racha al alza más larga desde diciembre de 2013.
La fuerza de este movimiento cogió por sorpresa incluso a los alcistas, que procedieron a recoger una gran cantidad de ganancias. El desarrollo de estas posiciones alimentó la oferta, lo que a su vez sometió el precio a una gran presión. El hecho de que el precio se estabilizara, en lugar de simplemente bajar, muestra que hay nuevos alcistas listos para absorber el repentino aumento de la oferta. Este período de comercio intenso entre los compradores que recogen beneficios y retirándose y los nuevos compradores que entran resulta en un repunte al alza, en cuanto toda la oferta de la bandera se consume.
El repunte indica a los primeros alcistas que la moneda está empezando otra etapa al alza. Tras asegurar sus ganancias, no tienen miedo de arriesgarse a otra posición. Su renovada demanda, conformada por la entrada de los nuevos alcistas, es el catalizador de otro potente movimiento. Ese repunte también tiende a disminuir cuando la recogida de beneficios se materializa dentro de la tendencia alcista.
Cuando los que querían abandonar la operación recogen beneficios, lo que lastra los precios, ofrecen otra oportunidad a aquéllos que perdieron el barco antes durante la subida, o a aquéllos que quieren duplicar su posición. El descenso de la oferta entonces se compone de una demanda renovada e impulsa aún más el precio.
La MMD 50 ha cruzado por encima de la MMD 200, desencadenando uno de los fenómenos técnicos que más se repiten en los gráficos, dentro de la bandera. Esto apoya el argumento de que la naturaleza de la bandera descendente no es bajista.
La tasa de cambio rebotó en el nivel de soporte en el extremo inferior de su canal ascendente, tocando fondo y mostrando que, en lo que respecta al impulso, la única posible dirección del precio es al alza.
Observe el mapa general del gráfico. La bandera se desarrolló en los máximos de marzo, a poca distancia de la cifra redonda psicológica del precio de 1,5000, y lo más importante, tras encontrar resistencia en la línea de tendencia bajista en vigor desde el nivel de 1,25, su cota más alta desde febrero de 2018.
Esta trifecta de resistencias deja claro por qué los inversores tuvieron que tomar aliento antes de atacar esta fortaleza.
Estrategias de trading
Los traders conservadores esperarán un repunte al alza más allá de este grupo de áreas de resistencia, por encima de 1,1500, y demostrarán que la tendencia alcista es sostenible con un movimiento de retorno que encuentra apoyo por encima de la bandera.
Los traders moderados probablemente se contentarán con un movimiento más allá del nivel de 1,1400 y los traders pacientes esperarán un retroceso para una mejor opción de entrada, si no la confirmación de la integridad del patrón.
Los traders agresivos podrían posicionarse tras un repunte, siempre que acepten el riesgo de una amplia orden de minimización de pérdidas, o una pérdida de posición si el precio oscila rápidamente, lo que es casi seguro, teniendo en cuenta los fundamentales, la geopolítica y los técnicos en juego.
Ejemplo de operación – Posición agresiva en largo
Entrada: 1,1300
Orden de minimización de pérdidas: 1,1150, por debajo de la parte inferior de la bandera, en caso de un informe de empleo no agrícola que favorezca al dólar
Riesgo: 150 pips
Objetivo: 1,1750
Recompensa: 450 pips
Relación riesgo-recompensa: 1:3