Las previsiones de demanda de soja se han deteriorado rápidamente después de que los inversores se familiarizaran con el lenguaje del acuerdo inicial firmado entre los dos socios comerciales más fuertes del mundo. La mala noticia: los cultivadores de soja ya no pueden confiar en la demanda automática de China.
A partir de un compromiso preestablecido para comprar soja americana, la terminología cambió a una promesa de comprar soja estadounidense según las "condiciones de mercado". En otras palabras, según la demanda nacional. ¿Y si cae la demanda? China reducirá sus pedidos. Un uso principal de la soja es la alimentación del cerdo. El número de cerdos chinos ha disminuido a causa de la reciente epidemia de peste porcina.
Como resultado, es muy probable que la demanda china de soja estadounidense disminuya, especialmente teniendo en cuenta que los aranceles sobre miles de millones de dólares en productos chinos siguen en vigor a pesar de la firma y que Estados Unidos va a limitar aún más las ventas al gigante tecnológico chino Huawei.
Los inversores no tardaron en reaccionar, llevando los precios a su cota más baja desde el 19 de diciembre.
La venta masiva llevó el contrato por debajo de su nivel de soporte de 927 dólares desde las cuatro sesiones que hicieron falta para conseguir dejar atrás ese nivel de precios desde la caída, del 17 de diciembre al 20 de diciembre.
Sin embargo, incluso durante el optimismo a la espera del diluido compromiso de China, los precios se mantuvieron por debajo del nivel de 950 dólares, ya que encontraron resistencia en la parte superior de un canal descendente desde junio de 2016. En el gráfico semanal, también nos damos cuenta de que los precios no pudieron mantenerse por encima de los niveles de 935 dólares. Fieles a esta línea de resistencia, mientras que los futuros de soja cerraron por encima de esa línea de oferta antes del acuerdo comercial, se han estrellado de nuevo después.
Mientras, el dicho "comprar con los rumores, vender con las noticias" puede desempeñar un papel importante, según el cambio fundamental en el lenguaje y el mapa técnico, creemos que los inversores han revertido sus previsiones sobre el crecimiento de las ventas.
En el gráfico diario, la cobertura del precio está respaldada tanto por la MMCD —cuya MM corta cayó de nuevo por debajo de la MM larga, desde una condición de sobrecompra— como por el RSI —que no sólo ha caído de nuevo apartándose del nivel de sobreventa de 70, sino que también proporcionó una divergencia negativa con respecto al precio, cuyos mínimos se mantienen planos mientras los máximos suben.
En el gráfico semanal, observamos que la acción del precio desarrolló una cuña ascendente, bajista dentro del canal descendente desde mediados de 2016. La supuesta resistencia del patrón se ve agravada en su parte superior, que el precio acaba de volver a conquistar por cuarta semana consecutiva, confirmando cada vez su resistencia.
Por último, la MA de 200 semanas está conectando los niveles de resistencia tanto de la cuña como de las partes superiores del canal. El RSI no ha podido mantenerse por encima del nivel de 56 desde principios de diciembre.
Y cuando damos un paso atrás, lo que surge es un posible gran techo que se extiende más de una década desde el desplome de 2008, cuyo punto más bajo es un abismo desconocido.
Los gráficos fundamentales y técnicos, tanto diarios como semanales, indican que el riesgo es a la baja.
Estrategias de trading
Los traders conservadores esperarán un repunte a la baja de la cuña, por debajo de 900 dólares, antes de posicionarse en corto.
Los traders moderados podrían posicionarse en corto poco después de un cierre con al menos una vela roja larga por debajo del nivel de 925 dólares, el fondo de la congestión desde diciembre, como decíamos anteriormente; después, esperarán a un movimiento de retorno que se encontraría con una oferta abrumadora.
Los traders agresivos podrían arriesgarse a posicionarse en corto ya justo después de un cierre por debajo del nivel de 925 dólares, sin esperar ninguna confirmación adicional de que la oferta ha ahogado la demanda en estos niveles.
Ejemplo de operación
Entrada: 925 dólares
Orden de minimización de pérdidas: 930 dólares
Riesgo: 5 dólares
Objetivo: 900 dólares
Recompensa: 25 dólares
Relación riesgo-recompensa: 1:5