- Los últimos acontecimientos podrían sugerir que el colapso financiero es inminente
- Pero la historia sugiere que este podría ser un año positivo para la bolsa estadounidense
- Esto se debe a que los mercados nos sorprenden cuando menos lo esperamos
- Cuando el mercado bursátil cerró por encima del 5% en enero, siempre resultó en un año positivo.
- El año siempre ha sido positivo si había 18 días consecutivos por encima de la media móvil de 200 días en febrero, tras una caída del 20% en el año anterior.
- En marzo, si el primer trimestre mostraba un crecimiento positivo, todo el año ha sido positivo en todos los casos.
- Si el rendimiento bursátil de los 100 primeros días supera el 8% en mayo, siempre ha dado lugar a un año positivo.
Puede que se haya dado cuenta de que el mundo financiero ha estado sometido a una presión constante últimamente, impulsado por acontecimientos que nos llevan a pensar que todo podría derrumbarse en cualquier momento.
Además, los inversionistas siguen mostrándose cautos tras un pésimo 2022.
Sin embargo, si nos fijamos bien, todos los grandes mercados han repuntado desde principios de año (desde el mínimo de octubre de 2022) y se encuentran en terreno positivo. Al menos en el caso de la renta variable.
Actualmente, en mi opinión, las carteras necesitan más apoyo de los bonos. Esto puede seguir siendo así hasta que los bancos centrales dejen de presionar al alza los rendimientos, y eso podría ocurrir posiblemente en el último trimestre de 2023.
Pero en el caso de la renta variable, este será un año positivo. No se fíen de mi palabra, ya que esto es lo que sugiere la historia:
Por un lado, tenemos estadísticas positivas con cinco meses de rendimiento positivo en 2023. Por otro, las noticias, las previsiones y las catástrofes que se avecinan sugieren un colapso inminente del mercado.
En los mercados puede pasar cualquier cosa, y en lugar de confiar en las predicciones, me parece más fiable y reconfortante seguir los números y las estadísticas basadas en más de 100 años de datos.
Incluso la reciente temporada de resultados ha mostrado una resistencia mayor de la prevista. El lado de los factores especulativos (valoraciones) parece estar recuperando lo perdido en 2022, como muestra la zona morada del gráfico S&P 500 que aparece a continuación.
Así que, como siempre, no es que sea siempre optimista, pero lo soy a largo plazo porque la historia bursátil estadounidense así lo sugiere. Pero a corto plazo, es importante recordar que los mercados se comportan como un péndulo, oscilando de un extremo a otro, al igual que el estado de ánimo de los inversionistas.
Me preocuparé cuando todo el mundo empiece a volver corriendo al mercado, y el carnicero del barrio me diga que está invirtiendo en acciones o criptodivisas como Bitcoin, o cuando la gente empiece a bombardearme con preguntas sobre las mejores acciones en las que invertir ahora mismo, como hicieron en 2021.
Hoy, sin embargo, lo único que veo es miedo a volver a entrar en los mercados y cautela. Todos los riesgos están sobre la mesa y, como siempre, salvo un cisne negro, mis inversiones seguirán rindiendo bien. Los mercados nunca reflejan lo que pensamos; hacen lo suyo y a menudo sorprenden.
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Descargo de responsabilidad: Este artículo se ha escrito únicamente con fines informativos; no constituye una solicitud, oferta, consejo, asesoramiento o recomendación de inversión. Como tal, no pretende incentivar la compra de activos de ninguna manera. Quiero recordarle que cualquier tipo de activo se evalúa desde múltiples puntos de vista y es altamente arriesgado; por lo tanto, cualquier decisión de inversión y el riesgo asociado recaen en el inversionista.