En enero el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE), medido por la tendencia-clico, mostró una variación interanual (% a/a) de 3,6%, dato mayor en 0,3 puntos porcentuales (p.p.) al del mes anterior, dejando la variación media (promedio últimos 12 meses) en 3,0%. La recuperación gradual del sector construcción y la solida demanda externa explican el resultado observado durante el primer mes del año.
Ese comportamiento está en línea con nuestra trayectoria de crecimiento económico, donde anticipamos una actividad tratando de acelerar su ritmo de crecimiento en la primera parte del año, para luego ir incrementado el dinamismo una vez finalizado del periodo electoral.
El sector construcción registra un incremento después de 8 meses de mostrar números rojos
En enero reportó una variación interanual de 0,3% frente al -2,7% y -6,3% observado en diciembre y noviembre de 2017, respectivamente. Ese resultado se explica por una recuperación gradual en la construcción con destino privado, la cual alcanzó su punto mínimo en setiembre de 2017, y desde entonces viene registrando un mejor desempeño. A ello se le complementa el fuerte dinamismo en la construcción con destino público (+16,7), explicado por las actividades de la construcción de la Terminal de Moín (APM Terminals).
Además, de acuerdo con nuestras estimaciones, las importaciones de materiales de construcción sirven de indicador adelantado del sector con un rezago de 9 meses. En ese sentido, en los últimos 4 meses las importaciones de materiales de construcción sugieren una recuperación en el sector, que vio su punto más débil durante los meses de setiembre y octubre, momento en que más se absorbió el efecto de las lluvias y la tormenta Nate.
Las actividades relacionadas con la demanda externa continúan liderando el crecimiento
Por un lado, la industria manufacturera mostró una variación interanual de 3,8%, manteniendo su ritmo promedio de crecimiento de 4,0%, mientras que la industria de servicios a otras empresas continua su paso solido de 4,4%. En gran medida esos sectores se benefician de la demanda externa, a través de las exportaciones de las zonas francas y las empresas de “shared services”.
Dicho lo anterior, seguimos proyectando que ese comportamiento se mantendrá, luego que el FMI revisara al alza las proyecciones del entorno global en enero pasado (la proyección de crecimiento económico para Estados Unidos en 2018 es de 2,7%).