La Bolsa de México medida por el índice S&P/BMV IPC cayó este miércoles hasta 51,350 puntos en operaciones intradía, y a 51,522 al cierre, con pérdida diaria de 0.65%. De esta forma, rompe el piso psicológico de 52,000 puntos, dejando expuestos los mínimos de 49,000 puntos que registró en los primeros días de este año. Sin embargo, es probable que “rebote” en cualquier momento, porque ya se presentan buenas oportunidades en diferentes acciones y el volumen negociado ha empezado a subir. También, la calificadora HR Ratings ha justificado en cierta forma el mayor déficit y deuda pública de 2024 aprovechando el espacio fiscal derivado del mayor crecimiento económico esperado, y la apreciación del tipo de cambio, a pesar de las políticas monetarias restrictivas vigentes en México y otros países. Sin embargo, si se considera que la relación deuda/PIB del 48.8% representa un límite prudencial, las mismas proyecciones de Hacienda sugieren que la siguiente administración iniciaría con importantes limitantes fiscales.
En Estados Unidos, la inflación (IPC) de agosto creció 0.6% mensual y 3.7% anual, una décima arriba del 3.6% estimado por el mercado y 5 décimas arriba del reportado en julio. La subyacente subió 0.3% mensual y 4.3% anual, quedando debajo del 4.7% del mes previo. Con estos datos, la Fed seguirá insistiendo sobre mayores tasas de interés, pero mientras, en la reunión de la semana entrante se espera que mantenga sin cambio la tasa en 5.50%.
Este jueves, el Banco Central Europeo (BOE) tiene reunión de política monetaria, y se espera que mantenga las tasas sin cambio.
A pesar del alza en la inflación general, la bolsa en Wall Street terminó con resultados mixtos, el DJI perdió 0.20%, pero el S&P-500 ganó 0.12% y el Nasdaq subió 0.29%.
El peso se volvió a apreciar frente al dólar, cerrando la cotización en $17.15 con ganancia de 0.58%, en tanto el dólar medido por el DXY solo subió 0.4%.