En el mes de septiembre, los mercados financieros han trazado la ruta que probablemente seguirán en los próximos meses o incluso años, con la baja en las tasas de interés por parte de los principales bancos centrales del mundo, los cuales han dejado abierta la expectativa de seguir buscando sus respectivos objetivos de política monetaria mediante más reducciones en las tasas de interés en este y el próximo año. Aunque parece ser un escenario positivo para las bolsas de valores, los bonos y algunos commodities, no se descarta el riesgo de una desaceleración económica.
En EUA y México, la actividad económica ha tenido un buen desempeño hasta el primer semestre de 2024, pero hacia adelante se espera que lo moderen.
Los tres principales índices de Wall Street han respondido bien al crecimiento de 3.0% que registró el PIB en Estados Unidos en el segundo trimestre del año, con ganancias promedio de 17.8% en el curso de este año, con posibilidades que se mantenga la tendencia alcista en Wall Street despendiendo del nivel que bajen las tasas de interés en las dos últimas reuniones de política monetaria pendientes.
En México, el índice S&P/BMV IPC presenta una caída de 8.0% en el curso de este año, derivado principalmente de la incertidumbre que prevalece con respecto al menor crecimiento económico de los próximos meses, luego que el mercado y el Banco de México han bajado las expectativas de poco más de 2.0% para todo el 2024, a un promedio de 1.5%. Sin embargo, la expectativa de menores tasas de interés podría darle impulso en el último trimestre del año.
El tipo de cambio cerró la semana en $19.69, a la espera del cambio de gobierno este martes 1-Oct-24.