- La Reserva Federal incrementó en 75 puntos base la tasa de referencia.
- El rango se ubicará ahora entre 4.25% y 4.50%, la postura ya es retrictiva.
- El dot-plot sugiere que habrá 75 puntos más de alza en 2023.
Choque de expectativas, anticipamos nerviosismo en los mercados
La Reserva Federal anunció hace unos instantes su última decisión del año, que consistió en incrementar 50 puntos base la tasa de referencia para llegar a un rango entre 4.25% y 4.50%. Con ello, 2022 propinó en total un alza de 425 puntos base a lo largo de los 12 meses, pues es importante recordar que las tasas estaban prácticamente en 0 a inicios de año. El ajuste es histórico y ahora la política monetaria se ubica en territorio restrictivo, por lo que, sumado a los temores de recesión global, la Fed decidió actuar con cautela y disminuir la magnitud de los incrementos tras 4 decisiones consecutivas de +75 pb. Sin embargo, el consenso en torno a este movimiento era amplio y en su lugar la atención se ha centrado en la información sobre lo que vendrá en los próximos meses.
La clave está en los cambios en las expectativas macroeconómicas del Comité de Mercado Abierto (FOMC), pues a pesar de los datos positivos de inflación que ha habido en los últimos 2 meses, el pronóstico de los integrantes se revisó al alza para 2022 (de 5.4% a 5.6% anual) y 2023 (de 2.8% a 3.1%). Las implicaciones para el ambiente de política monetaria son ineludibles y, por lo tanto, el dot-plot se ha modificado de manera que ahora muestra una tasa de equilibrio entre 5.00% y 5.25% para 2023, algo que está lejos del escenario de recortes que los mercados han anticipado en semanas recientes.
¿Qué esperar?
A pesar de que el optimismo vivido en las últimas jornadas sugería una realidad menos incómoda, el entorno macroeconómico ha cambiado poco y la inflación se mantiene como el principal reto de la agenda de política económica. Ante la incertidumbre que prevalece sobre la trayectoria futura y los antecedentes que avisan del peligro de relajar la postura monetaria anticipadamente, la Fed busca dar un mensaje de compromiso para cimentar las expectativas en diferentes periodos de tiempo. Dado que el mercado laboral aún no ha mostrado señales de agotamiento y en general la economía luce mucho más resiliente que lo anticipado, creemos que el camino está dado para que las autoridades continúen con la normalización en el primer trimestre de 2023 y esperamos una nueva alza de 50 puntos base en al anuncio de febrero, lo que a su vez mantendrá a Banco de México con posibilidades limitadas de despegarse del ciclo. Hasta ahora, las principales variables financieras han tenido una reacción moderada, pero esperamos que el nerviosismo se acentúe el resto de la semana. Por lo pronto, el tipo de cambio presenta una depreciación de 0.93% en la sesión de hoy, aunque la mayor aversión al riesgo podría prolongar el movimiento y regresarlo pronto a niveles arriba de $19.80.