El ministro de Economía, Martín Guzmán, se refirió a la situación de las negociaciones entre el gobierno argentino y los acreedores privados y aseguró que “no queremos comprometernos a algo que no vamos a poder cumplir. Sería poco realista seguir aumentando las promesas de lo que podemos pagarle a los acreedores”.
El jefe de la cartera económica ratificó la última propuesta oficial realizada por la Argentina, que ofrece un valor presente neto de 53,50 dólares por cada plancha de US$100.
“Hemos hecho una oferta, y luego, a pesar de la pandemia de coronavirus que tuvo consecuencias muy malas para la economía, la mejoramos significativamente. Esto es lo máximo que la Argentina puede hacer sin comprometer los objetivos sociales que queremos alcanzar”, explicó el funcionario en diálogo con Bloomberg TV.
En este marco argumentó que las autoridades del país aumentaron los pagos ofrecidos en más de 10.000 millones de dólares si se comparan con la primera oferta que presentó el gobierno en abril.
Por parte de los acreedores privados, el grupo de fondos de inversión, Ad Hoc, el Grupo Exchange y el Comité de Acreedores de la Argentina, publicaron una carta el lunes para presionar a la administración de Alberto Fernández, asegurando que poseen la tenencia del 60% de los bonos del canje 2005 (Discount y Par) y más del 51% de los títulos emitidos durante el gobierno de Mauricio Macri.
De esta manera, el grupo de bonistas tendría la posibilidad de hacer fracasar al canje ya que el gobierno nacional no lograría ni siquiera un 50% de aceptación.
En sintonía con las declaraciones de Guzmán, Fernández se mostró reacio ante la posibilidad de mejorar nuevamente la propuesta. “Los acreedores tienen que saber que no vamos a postergar a ningún argentino para pagar una deuda que no podemos pagar”, reiteró el mandatario en una conferencia desde la Quinta de Olivos, quien ya manifestó en varias ocasiones que la Argentina puede volver a postergar la fecha límite para alcanzar el acuerdo si las conversaciones se estancan.
Desde que comenzó el 2020, el gobierno nacional y los acreedores privados han dialogado para lograr la reestructuración de unos 66.300 millones de dólares en títulos emitidos bajo legislación extranjera. Pero además de la cuestiones a resolver con los fondos de inversión, la Argentina tendrá que negociar con el Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre el préstamo stand by pactado en 2018.
“Comenzaremos el diálogo una vez que finalice la renegociación con los acreedores privados. Nosotros confiamos en que logrará a un acuerdo exitoso con el FMI, ya que el vínculo hasta ahora fue constructivo”, respondió Guzmán cuando fue consultado por el programa financiero que el país acordó con la organización multilateral de crédito.