Durante la semana asistimos a la famosa divergencia (que ya habíamos mencionado anteriormente) entre el IPC (al alza) y el IPC subyacente (a la baja), unida a la subida de 25 puntos básicos de los tipos del BCE. La semana que viene, en cambio, será sin duda la semana de la Fed, con la reunión y posterior anuncio de su decisión sobre los tipos prevista para el miércoles.
Por lo que se refiere a la decisión de la Reserva Federal sobre los tipos de interés, se da ya casi por hecho que se anunciará una interrupción de las subidas de tipos, y nuestro Barómetro de Seguimiento de los Tipos de la Fed de Investing.com asigna un 100% de probabilidades (frente al 92% de la semana anterior).
De hecho, muchos empiezan a preguntarse si se trata o no del punto de giro, es decir, ese nivel a partir del cual, tras una pausa, empezará la caída. Pero si algo nos ha enseñado el pasado es que hacer previsiones (e invertir en base a ello) es un gravísimo error, de hecho el Punto de Pivote, teóricamente, ya debería haber llegado entre febrero y marzo, y en cambio aquí seguimos.
¿Y cuándo llegará por fin?
Estadísticamente, en el pasado, desde el fin de las subidas de tipos hasta la primera bajada, la pausa dura una media de cinco meses. Esto significa, que si la inflación sigue mostrando signos de desaceleración, y por lo tanto la Fed ya no se ve obligada a subir, podríamos empezar a ver cierta relajación a partir del primer trimestre de 2024, siempre utilizando el condicional, por supuesto.
Mientras tanto, la economía estadounidense, y en particular el mercado laboral, siguen mostrándose sólidos y robustos, otro factor que da a la Fed más margen de maniobra que a sus homólogos europeos, donde los datos económicos empiezan a mostrar signos de angustia.
Desde el punto de vista del mercado, septiembre sigue siendo un mes difícil, el más difícil de todos en términos de estacionalidad, con más periodos negativos que positivos (67-56).
Pero si hay algo más que hemos aprendido en el último año y medio es que a la Fed, desde el punto de vista de los mercados, no le importa prácticamente nada, y no creo que la Fed nos haga saber cuándo decide realmente parar.
¡Hasta la próxima!
"Este artículo se ha escrito únicamente con fines informativos; no constituye una solicitud, oferta, consejo o recomendación para invertir como tal y no pretende en modo alguno fomentar la compra de activos. Me gustaría recordarles que cualquier tipo de activo se valora desde muchos puntos de vista y es altamente arriesgado y por lo tanto, cualquier decisión de inversión y el riesgo asociado es responsabilidad del inversor. El autor no posee ninguno de los valores mencionados en el análisis".