Stocks de maíz en EEUU han sido menores a lo previsto, aunque seguimos observando un panorama muy holgado. Mirada de corto plazo en la encuesta de siembra norteamericana y de mediano plazo en el valor del dólar.
El reporte del USDA ha sido ligeramente favorable para el maíz, más allá del escenario holgado que se está registrando en EEUU. En este sentido, las existencias divulgadas por el organismo han sido 400 mil tt inferiores a lo previsto por los privados (actualmente en casi 59 mill tt, tal como se aprecia en el gráfico 5 es la segunda caída consecutiva en la evolución mensual), aunque se ubican en el mayor nivel desde la campaña 87/88.
Por su parte, en comparación a mayo cuando se conocieron las primeras estimaciones oficiales, las proyecciones actuales resultan superiores en más de 4 mill tt.
El recorte en las estimaciones de stocks es atribuible principalmente al etanol, considerando que su consumo de maíz (responsable de aproximadamente el 45% de la demanda doméstica en EEUU) ha evidenciado un salto de 700 mil tt frente a enero.
Desde octubre esta variable ha exhibido un incremento cercano a 2 mill tt, para ubicarse actualmente en torno a 136 mill tt y alcanzar un récord histórico (este panorama queda reflejado en el gráfico 6).
El ciclo en curso está agregando más de 13 mill tt a las existencias norteamericanas, lo que resulta el mayor incremento desde la campaña 04/05 (en ese año el aumento de las inventarios ha sido de 29 mill tt; esto queda expresado en el gráfico 7).
Por su parte, en forma acumulada vemos que el fortalecimiento de los stocks desde el período 13/14 en EEUU ha sido de 33 mill tt (para dimensionarlo implica un volumen cercano a la producción que se proyecta para nuestro país en la próxima cosecha); esta expansión en los inventarios no se observaba desde el trienio 97- 99.
Al igual que en soja, el comportamiento de los precios estará supeditada a la encuesta que se hace a finales de mes entre más de 80 mil productores para saber que van a sembrar en EEUU, así como también lo que ocurra con los mercados externos (principalmente dólar y petróleo). Por el momento la apuesta especulativa en Chicago por este producto resulta limitada.