Los precios al consumidor decrecieron 0.03% mensual en julio, ligeramente
más que nuestra expectativa de -0.01% (consenso: +0.02%). La inflación
subyacente también resultó por debajo de lo estimado al incrementarse
solamente 0.03% mensual vs. nuestro estimado 0.06%. La principal desviación con respecto a nuestro estimado vino por tres factores: (1) Una subestimación de la contribución de los precios de las frutas y las verduras (-7bps vs. nuestro - 5pbs); (2) una menor contribución de los precios de otras mercancías (+4pbs vs. +6pbs); y (3) una contribución mayor a lo esperado de las tarifas del gobierno (+2pbs vs. +1pbs), como se muestra en la tabla de abajo.
La inflación de julio se explica por la caída de los precios agrícolas y de
mercancías ex. alimentos, lo que más que compensó por presiones en
energéticos y en otros servicios. Los precios agrícolas cayeron 1.5% mensual, derivado de descensos en los precios de frutas y verduras (tomate: -13.7%; tomate verde: -24.1%, uvas: -21.5% y chile Serrano: -16.2%, entre otros). Adicionalmente, las presiones sobre los precios de los productos pecuarios siguen retrocediendo, en particular, derivado de menores precios del huevo (- 5.1% en julio) y el pollo (+2.5%). Adicionalmente, los precios de mercancías ex. alimentos retrocedieron 0.34% mensual. Estos números más que compensaron por las presiones observadas en los precios energéticos y de servicios. En el primer caso, la inflación resultó de 0.63% en julio, xplicado
por mayores precios de la gasolina de bajo octanaje y del gas LP (+0.97% y
+0.68%, respectivamente).
Ver informe completo en PDF adjunto