El optimismo de los mercados financieros estará atento a los indicadores económicos que se vayan dando a conocer a lo largo de la semana y en el resto del mes, ya que están por concluir los reportes trimestrales en Estados Unidos, considerando que han reportado poco más del 93% de las empresas que integran el S&P-500.
Durante la semana pasada, los tres principales índices de Wall Street alcanzaron nuevos máximos históricos y terminaron con ganancias promedio de 1.63% en la semana. El optimismo de los inversionistas estuvo generado por la expectativa de que la FED no subirá más las tasas de interés, y por los mejores datos de inflación reportados al mes de abril, respecto a los estimados del mercado, junto con algunos indicadores que muestran cierta debilitad e la economía y que apoya el objetivo de la FED para bajar la inflación. Técnicamente, el Dow Jones, el S&P-500 y el Nasdaq mantienen señales técnicas positivas, pero también muestran niveles de sobre venta altos medidos por su indicador de fuerza relativa (RSI), lo que hace posible que en el corto plazo entren en un periodo de consolidación.
En México, el índice S&P/BMV IPC cerró la semana en 57,583 con pérdida de 0.23%, y aunque ha superado en varias ocasiones la resistencia de 58,000 puntos en operaciones intradía, sigue siendo el principal objetivo a vencer, aun cuando sus principales indicadores técnicos se mantienen neutrales.
Durante esta semana habrá varias emisoras del principal índice de la Bolsa que pagarán dividendos, entre las que están: MEGA CPO, LIVEPOL C-1 Y GMEXICO B, las cuales pueden influir en el desempeño del IPC. También se espera para este jueves resultados del PIB del 1er trimestre del año estimado en 1.6% anual, y la inflación de la 1ª quincena de mayo estimada en -0.21% que la llevaría a una tasa anual de 4.79%, arriba del 4.67% de la quincena anterior.
El tipo de cambio cerró la semana en $16.60 con ganancia de 1.1%, ante la debilidad del dólar que perdió 0.78% en la semana. La fortaleza del peso también se le atribuye al crecimiento de la inversión extranjera directa que alcanzó nivel récord de US$20.300 millones en el 1er trimestre del año, siendo la mayor parte por reinversión de utilidades.