Hace una semana, en estas mismas páginas, decíamos que Donald Trump buscaba victorias rápidas en tres frentes que tiene abiertos con el fin de mejorar su imagen antes de las elecciones legislativas de noviembre: las negociaciones dentro del TLCAN, las amenazas comerciales con China y el conflicto nuclear con Corea del Norte. Y en esa difícil y urgente coyuntura, el régimen sirio de Bachar al Assad le proporcionó la victoria más rápida y fácil que se podía imaginar: su gobierno, despótico y cruel, ha llevado al país a una cruenta guerra civil que dura ya siete años, y actúa sin piedad contra su propio pueblo. El supuesto ataque químico de las tropas sirias en Duma, una ciudad a las afueras de Damasco controlada por fuerzas rebeldes, hizo que el gobierno estadounidense contraatacara, por segunda vez durante la administración de Trump, con un nuevo ataque de misiles el pasado viernes, lo que permitió a un ufano Trump tuitear el sábado “misión cumplida”. En el ataque no fue solo, sino que lo hizo acompañado por Francia y Reino Unido bajo el argumento de detener la proliferación de armas químicas, un asunto espinoso que se ha visto enrarecido, además, por el envenenamiento de un ex-espía ruso y su hija en Inglaterra con un gas nervioso sólo producido en Rusia.
Si eso le ayudará en las elecciones no lo sabemos, pero quizás le permita mejorar algo su imagen. Tras quince meses en la Casa Blanca, según la encuesta de ABC News/Washington Post, su ratio promedio de aprobación es de 38% frente a un 57% que lo desaprueba, y sigue siendo, para un período semejante, el presidente peor valorado desde al menos el final de la Segunda Guerra Mundial, cuando el país estuvo presidido por Harry S. Truman.
Lo más difícil de la operación era atacar al régimen de Al Assad y sus arsenales químicos sin provocar una represalia por parte del gobierno ruso, con un Vladimir Putin recién reelegido, y sin inmiscuirse más en la interminable guerra civil de Siria. En esa operación, 105 misiles fueron lanzados contra tres instalaciones de armas químicas. Pero ni las tropas ni las instalaciones rusas se vieron amenazas ni se vieron en la necesidad de utilizar sus defensas aéreas para derribar ninguno de los misiles. Por tanto, si bien desde Moscú se condenó el ataque, no hubo atisbos de que fueran a encontrar una respuesta militar por parte de Vladimir Putin. En el mismo sentido se manifestaron los aliados chiíes de Bachar al Assad en la región: Irán y el grupo libanés Hezbolá. En el otro extremo, el principal aliado de Estados Unidos en la región, el régimen suní de Arabia Saudí, ha declarado estar dispuesto a entrar en una coalición con Trump en caso de que se lo pidieran.
Sin embargo, no parece que el ataque sobre Siria vaya a ser el inicio de una confrontación global, con una escalada de tensiones entre Estados Unidos y Rusia. Y así lo sugiere la respuesta de las bolsas árabes en la jornada del domingo. En Arabia Saudí, el índice Tadawul registró un alza de 1.9%, su mejor jornada en diez meses, y todas salvo una acción terminaron al alza. Por otro lado, el índice de referencia en Dubai, el DFM, aumentó un 1.83%, su mayor alza desde junio, y el de Abu Dhabi acabó en su mejor nivel desde agosto de 2015 tras ganar un 1.0% en la sesión.
De ser así, y salvo que se conozcan nuevas declaraciones antes de la apertura del lunes, los mercados pueden registrar un rally de alivio en la jornada de hoy, cuando la atención retorne, fundamentalmente, a la temporada de reportes corporativos. Una temporada que, por otro lado, se prevé que sea espectacular, sobre todo en lo que se refiere a las utilidades: el crecimiento de los beneficios en el primer trimestre para el S&P’s 500 se estima que fue de un 17.1%, por encima de la tasa de 15% observada en el cuarto trimestre del año pasado, lo que significará el crecimiento más robusto desde el 2011.
Las jugosas utilidades que se prevén para el primer trimestre tienen tres causas muy claras: la primera, y principal, es el recorte de impuestos de Trump. Ese impacto ya se ha visto reflejado en los pocos informes trimestrales que se han publicado hasta la fecha, sobre todo del sector financiero. La tasa de impuestos efectiva de Citigroup (NYSE:C) se redujo de 31% en el primer trimestre de 2017 a sólo un 24% este año, en tanto la de JP Morgan (NYSE:JPM) disminuyó de 23% a 18%. Y ese impacto se sentirá a lo largo de todo el año en un contexto de firme crecimiento económico. Del 17.1% del primer trimestre, se pronostica que el crecimiento de las utilidades se aceleren a 19.4% en el segundo, y 21.5% en el tercero, antes de frenarse a 18.3% al final del año.
La segunda causa es la fuerte recuperación de los beneficios en el sector de energía como resultado de la recuperación en los precios del petróleo. El barril de WTI promedió 62.9 dólares en el primer trimestre de 2018, o un incremento del 21% respecto al promedio del mismo período del año pasado. Eso hará que las utilidades en el sector energético vayan a crecer en torno a un 74% anual en el primer trimestre. El tercer factor a tener en cuenta será la depreciación del dólar, lo que inflará las utilidades de las grandes empresas multinacionales que tienen fuertes ingresos en otras divisas.
Sin embargo, el recorte de impuestos de Trump es un factor extraordinario que se diluirá a lo largo de 2017, y que el mercado ya tiene descontado. Por tanto, para fijarse realmente en la marcha de las empresas para el mediano plazo y la salud de sus negocios, los inversionistas mirarán a los ingresos, quizás la variable clave a observar en esta temporada de reportes. Y aquí la situación no es tan boyante. Pese a los estímulos aplicados por Trump, la economía estadounidense no se ha revitalizado demasiado y las ventas no mejorarán mucho. Por el contrario, se prevé que vayan perdiendo impulso conforme avanza el 2018. Para el primer trimestre, se prevé que los ingresos de las compañías del S&P’s 500 se incrementen en 6.9%, por debajo de la tasa de 7.9% observada en el cuarto trimestre. Mejorarán un poco en el segundo trimestre (7.5%) para desacelerarse a 6.8% en el tercero y 4.9% en el cuarto.
Sea como sea, la realidad es que desde el derrumbe del mercado en febrero, Wall Street no ha logrado levantar la cabeza con el ímpetu que se preveía y permanece aún bastante lejos de sus récord históricos. Lo que ha habido, sobre todo, ha sido volatilidad, al haberse amontonado varias preocupaciones y noticias malas en estas últimas semanas: los ataques de Trump contra Amazon (NASDAQ:AMZN), el escándalo de Facebook (NASDAQ:FB), los impuestos al acero y al aluminio, los encontronazos comerciales entre Estados Unidos y China, el conflicto con Siria, la reactivación de la trama rusa y la amenaza de despedir al fiscal especial, Robert Mueller, y a quien lo supervisa, el vicesecretario de Justicia, Rod Rosenstein, la redada del FBI a las oficinas del abogado personal de Trump, Michael Cohen, y así. Y eso sin olvidar los temores de un repunte inflacionario que haga a la Reserva Federal moverse más rápido.
Ahora le llega el turno a las empresas, el verdadero motor de cómo se mueven los precios de las acciones en Wall Street. Y veremos si sus grandes números, por sí solos, logran que Nueva York regrese a los días de euforia que se vivieron en enero y así llevar a los mercados a nuevos récords. Pero cuidado: la clave, esta vez, más que el crecimiento de las utilidades, estará en la evolución de los ingresos.
INFOGRAFÍA
Siria le regaló a Trump lo que tanto anhelaba: una victoria rápida, fácil y espectacular frente a su electorado. El supuesto uso de armas químicas por el gobierno sirio abrió las puertas a una intervención militar que se cuidó de no dañar los intereses rusos para no provocar una escalada de tensiones, lo que puede mejorar la aprobación de Trump, cuyo registro es el peor en la historia reciente de EU…
Fuente: ABC/Washington Post
… que se respira un cierto alivio se pudo apreciar en la jornada de ayer domingo en las bolsas de Oriente Próximo, al no haber habido ninguna declaración de Rusia o Irán sobre futuras represalias por el ataque de EU. La bolsa de Arabia Saudí avanzó 1.9% y treparon todas las acciones menos una, la de Dubai un 1.83% y la de Abu Dhabi un 1.0%. Hoy pueden subir las bolsas mundiales…
Fuente: Bloomberg
… si Siria no da más que hablar, la atención se volcará ahora a los informes trimestrales de las compañías estadounidenses. Gracias al recorte de impuestos, se espera que las utilidades de las empresas del S&P’s 500 se eleven un 17.1% en el primer trimestre, el mejor resultado desde el primer trimestre de 2011. Y se pueden fortalecer aún más conforme avanza el 2018…
Fuente: FactSet (NYSE:FDS). En rojo, estimaciones Bloomberg para 2018
.. sin embargo, las fuertes ganancias de Wall Street por el recorte de impuestos ya pueden estar descontados por el mercado, por lo que los inversionistas, para evaluar la salud de sus negocios, la demanda que tienen, y sus perspectivas de mediano plazo, mirarán sobre todo a los ingresos. La economía, pese a los estímulos de Trump, no ha registrado una mejora sustancial en la actividad.
Fuente: Bloomberg. En rojo pronósticos 2018