Editorial
En la semana pasada regresó un poco el estrés bancario ante las preocupaciones sobre el futuro de First Republic Bank, que desde el tumulto provocado por la quiebra de Silicon Valley Bank en marzo pasado, no ha logrado recuperarse por completo. La incertidumbre creció al darse a conocer su reporte trimestral. En este sentido, también destacaron las cifras publicadas por las grandes empresas de EUA, que en términos generales superaron expectativas. Además, las cifras económicas globales sirvieron para evaluar el riesgo de recesión. Particularmente, el PIB estadounidense del primer trimestre del año moderó de forma robusta su ritmo de crecimiento. El tema del techo de la deuda en EUA también comienza a tomar fuerza, donde se espera una complicada negociación entre republicanos y demócratas. En México, también fue noticia el indicador oportuno del PIB del 1T23, que confirma el buen comienzo de año.
La creciente tensión con respecto a lo que sucederá con First Republic Bank y cómo se verán afectados los otros bancos generó de nueva cuenta episodios de aversión al riesgo, incluso eclipsando el entusiasmo que pudieron despertar los buenos resultados de las tecnológicas estadounidenses.
Todavía se mantiene cierta preocupación de que la pérdida de confianza en el futuro de First Republic Bank pueda terminar contagiando a otros bancos, lo que generaría un endurecimiento de las condiciones crediticias y, por lo tanto, contribuyendo a una posible desaceleración más fuerte de la economía de EUA.
Por otro lado, según la primera estimación, sujeta a dos revisiones, el crecimiento del PIB de EUA se moderó en el primer trimestre del año a 1.1% (trimestral anualizada).
Se trata así de un freno respecto a lo reportado también en el último trimestre de 2022, cuando la economía aumentó 2.6% y envía algunas señales de un posible enfriamiento gradual como resultado de la estrategia de la Fed de subir la tasa de interés, sobre todo por el retroceso en la inversión privada. Todavía sin poder confirmarse uno de los principales temores entre analistas e inversionistas, de que si la economía de EUA está entrando a una recesión económica. La economía se ha ralentizado un poco, pero sigue creciendo.
En este sentido, un elemento que justifica también este menor dinamismo es el rubro de inventarios, que le restó 2.26 puntos porcentuales al PIB, por lo que el crecimiento económico fue más robusto de lo que la cifra final podría mostrar.
Asimismo, el principal componente del PIB, el consumo privado, creció 3.7%, muy por arriba del 1.0% del trimestre previo, aunque ligeramente por debajo del 4.0% esperado.
En un año, la Reserva Federal ha acometido las subidas de tasas de interés más agresivas desde comienzos de la década de los ochenta.
La Fed se reúne esta semana, donde la expectativa es un incremento de su tasa de interés por 25pbs y se plantearía si hacer una pausa en las subidas de tasas. Esta pérdida de dinamismo en el crecimiento puede ser una señal de que el endurecimiento de la política monetaria da sus frutos. El banco central busca un aterrizaje suave: frenar la economía sin que entre en recesión. El dato del PIB iría en esa línea.
Además, las métricas de inflación favoritas de la Fed se aceleraron. El índice de precios del gasto del consumo personal (PCE por sus siglas en inglés) creció a un ritmo anualizado de 4.2% en el primer trimestre del año. Excluyendo bienes volátiles como energía y agropecuarios, el índice se ubicó en 4.9%, su mayor nivel en un año.
También comienza a surgir como un foco de preocupación el tema del techo de la deuda de EUA. Incluso, se ha dado un brusco repunte de seguros de impago de la deuda estadounidense (CDS), más caros que en 2011, la última vez en que el debate sobre el techo de la deuda federal suscitó tanta polémica. Es previsible que el gobierno federal alcance dicho techo entre julio y agosto. El Tesoro, en función de los ingresos tributarios, podría afrontar problemas de liquidez en junio. La correspondiente crispación política ha provocado abrupta caída de las rentabilidades a vencimiento de la deuda soberana del país norteamericano a un mes.
Así, el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, logró que su proyecto de ley de deuda fuera aprobado por la Cámara, lo que intensifica la presión para que el presidente Joe Biden inicie conversaciones con los republicanos sobre el aumento del límite de la deuda. Pero Biden está adoptando una postura firme contra el plan y dice que el límite de la deuda “no es negociable”. El proyecto de ley, que fue aprobado por un estrecho margen de 217 contra 215, no tiene posibilidades de ser aprobado por el Senado, que está controlado por los demócratas.
En México, de acuerdo con la estimación oportuna En México, en el primer trimestre de 2023 y con cifras ajustadas por estacionalidad, de acuerdo con la estimación oportuna el PIB se expandió 1.1% con respecto al trimestre inmediato anterior, por arriba del 0.8% anticipado. Las actividades terciarias avanzaron 1.5 %; las secundarias, 0.7 % y primarias disminuyó 3.2 %. A tasa anual, la estimación oportuna del PIB ascendió a 3.8 %. Así, se confirma el buen inicio de año que tuvo la economía mexicana.
Como ha sido en las últimas semanas, el peso mexicano estuvo volátil, con altibajos, cotizando en rango acotado. Por momentos, la aversión global al riesgo lo presionó un poco, pero nada extraordinario, a niveles cercanos a $18.20 spot. Ahora la atención está puesta en los mensajes que ofrezca la Fed en su reunión de esta semana.
Principales referencias económicas y eventos de la semana
Las principales referencias económicas y financieras serán la reunión de la Fed y el reporte de empleos en EUA.
Adicionalmente, en EUA se publicará de marzo: gasto en construcción, pedidos de fábrica y balanza comercial; de abril: ISM manufacturero y de servicios, y cambio en el empleo privado medido por la agencia ADP; así como el cambio en inventarios de petróleo y solicitudes iniciales de subsidio por desempleo.
En Europa, habrá decisión de política monetaria del Banco Central Europeo; y dato de estimación de inflación de abril. En China, PMI manufacturero, compuesto y de servicios Caixin de abril.
En México, se publicará la encuesta de expectativas de Banxico; datos de inversión fija bruta de febrero; tasa de desempleo de marzo e índice de confianza del consumidor de abril.
Expectativa para el Tipo de cambio
La atención la eclipsará la reunión de política monetaria de la Fed. Todo parece indicar que la autoridad estadounidense subirá 25 puntos base su tasa de fondeo. Las dudas se enfocan en sí anunciará la tan esperada pausa del endurecimiento monetario, así como si se mantiene en su escenario base el que no contemplan recortes en la tasa de interés en lo que resta del 2023. La tan esperada decisión se da justo antes de conocer las cifras de empleo estadounidense del mes de abril. La expectativa es una creación por debajo de los 200 mil trabajos, algo no visto desde diciembre de 2020, pero todavía son cifras que mostrarían un mercado laboral fuerte. La temporada de reportes corporativos continúa a nivel global y seguirá incidiendo en el ánimo de los operadores, sobre todo por la necesidad de contar con pistas para evaluar el riesgo de recesión económica. Dado lo anterior, durante la semana la moneda mexicana podría fluctuar entre los $17.85 y $18.25 spot.
Expectativa para las Tasas de interés
En el mercado primario, la tasa de Cetes a 28 días podría registrar un aumento; por su parte, el rendimiento para los bonos de 10 años en el mercado secundario, podría moverse entre 8.65% – 8.95%.