A finales del año pasado los mercados fueron sorprendidos por los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) al mantener sin cambios su producción de petróleo a medida en que los precios caían. En la reunión de este 2015, que se realizó la semana pasada, la señal del cartel fue mantener su estrategia, aunque ya el mercado ha comenzado a cuestionar si fue verdaderamente una decisión o si el grupo ya tiene poco control sobre el precio del crudo.
Antes del encuentro se presentaron noticias que sugerían la posibilidad de un corte en la producción; no obstante, la decisión final fue mantener la producción tal y como está (en máximos no vistos en años), por lo que es probable que los miembros continúen extrayendo grandes cantidades de petróleo, con el fin de mantener clientes y, al mismo tiempo, fondear sus abultados presupuestos gubernamentales.
Reportes recientes colocan a los sauditas y a los rusos en una “guerra” por los consumidores europeos, lo que los obligó a reducir precios y hasta asumir los costos de transporte de la materia prima.
Este movimiento del cartel podría verse como una continuación de la estrategia de mantener precios bajos para sacar del mercado a los productores con costos altos, pero también puede deberse a la poca influencia que tiene el grupo, debido al exceso que existe de reservas. Según la IEA, agencia que asesora a países ricos en temas energéticos, las reservas han alcanzado los 3.000 millones de barriles.
El cartel, que produce un 40% del petróleo mundial, también desea analizar el impacto que tendrá la inclusión al mercado de Irán, una vez que se vayan eliminando las restricciones, debido a un trato que firmó con varias potencias mundiales.
La decisión de la OPEP ha llevado al barril de petróleo a niveles no vistos desde la caída del banco de inversión Lehnman Brothers; la referencia estadounidense cayó por debajo de los US$40, mientras que el Brent se mantiene cerca de los US$41.
Para Costa Rica esta coyuntura implica una extensión de los beneficios que ha generado la caída en los precios del petróleo, por lo que no se deberían de esperar presiones inflacionarias por esta vía en el mediano plazo, lo que respalda nuestra expectativa de que las tasas de interés en colones se mantendrán estables durante la primera parte del 2016.