Editorial
Concluye una semana donde la atención la concentró la decisión de Fitch de recortar la calificación de la deuda soberana de EUA. Esta acción provocó un cambio en el sentimiento de los operadores e inversionistas, acelerando reacomodos de portafolio, incentivando la toma de utilidades y aumentando la aversión global al riesgo. Las caídas fueron generalizadas ante la sorpresiva decisión de la calificadora. También fue noticia la situación del mercado laboral estadounidense, que si bien ofrece algunas señales de moderación, en términos generales se mantiene fuerte. En México, la economía creció todavía un poco más de lo anticipado en el segundo trimestre del año, lo que abre la puerta a nuevas revisiones al alza en las estimaciones del PIB para todo el 2023.
La agencia de calificación Fitch rebajó la calificación de la deuda de Estados Unidos al nivel AA+, un punto por debajo de la nota más alta, después de haberla puesto en observación negativa el pasado mayo por el impase en la negociación para ampliar el techo de deuda. En un comunicado, la agencia se refirió al deterioro fiscal esperado durante los próximos tres años y a la deuda cada vez más alta del Gobierno estadounidense entre los motivos por los que ha tomado la decisión.
Una vez más, cuando se esperaba un agosto tranquilo ya que suele bajar el volumen de operación por las vacaciones de verano, el mercado ha dado una muestra más de su imprevisibilidad a corto plazo. El recorte de Fitch está siendo el pretexto para operadores e inversionistas para tomar utilidades en la mayoría de los activos riesgosos.
El anuncio de Fitch generó reacomodos de portafolios a nivel global, aumentando la aversión al riesgo y ampliando la búsqueda de activos considerados seguros, entre los que destacan aquellos denominados en dólares y yenes.
En el mercado de deuda, la rentabilidad del bono del tesoro estadounidense a 10 años se acercó al 4.20%, máximos desde noviembre de 2022, lo que refleja un aumento en los costos de financiación de Estados Unidos, que tiene por delante un exigente calendario de emisiones de deuda.
Hasta cierto punto la decisión de Fitch es una sorpresa negativa, pero consideramos tendrá impacto limitado en los mercados financieros. En términos generales, EUA está mejor posicionado en materia fiscal que hace un año y ha mejorado la posibilidad de pago de sus compromisos financieros. Los activos denominados en dólares no dejarán de ser considerados de los más seguros a nivel mundial. Así, los posibles impactos negativos en los precios de los activos serán temporales y los operadores e inversionistas volverán a concentrar su atención en temas como la política monetaria y el riesgo de recesión económica.
Donde si pudiera tener mayores implicaciones es en los índices y fondos de inversión con un mandato exclusivamente AAA, lo que podría dar lugar a ventas forzosas ahora que dos de las tres principales agencias de calificación ya no conceden la máxima calificación a la deuda soberana estadounidense.
Por otro lado, Estados Unidos también fue protagonista por los nuevos datos del mercado laboral. El informe oficial de empleo sigue mostrando resiliencia, que si bien se han moderado un poco respecto a meses previos todavía reporta generaciones de trabajo altas. Así, en términos generales, con estos datos, se consolidan las apuestas de que la Fed podría dejar sin cambios su tasa de interés de referencia en próximos encuentros de política monetaria y le da fuerza al escenario de un posible aterrizaje suave de la economía norteamericana. Este informe contribuyó a recortar parte de las pérdidas registradas en la semana en los activos de mayor riesgo.
En México, el crecimiento económico durante el segundo trimestre mantuvo el buen paso de comienzos de año. De acuerdo con la estimación oportuna, en términos anuales y con cifras desestacionalizadas, la economía se expandió 3.6% durante el periodo abril-junio. Con ello, en el primer semestre de 2023, el PIB aumentó 3.6 %. Lo relevante será sí mantiene este buen ritmo en la segunda mitad del año.
El peso mexicano tuvo una semana negativa, presionándose por el tema de la decisión de Fitch a su peor nivel desde junio pasado. El factor del carry trade que ha estado detrás en gran medida la fuerte apreciación del peso mexicano en el último año se ha dado principalmente con EUA y Japón. Es en este sentido, que la búsqueda de estos dos activos refugio le afectó en mayor medida a la cotización de la divisa mexicana, respecto a otras opciones de inversión. Después, el informe de empleo estadounidense ayudó a borrar la mayoría de las pérdidas, para volver a acercarse a niveles alrededor de $17.0 spot.
Sin embargo, el riesgo de mayores episodios de depreciación seguirá latentes mientras concluyan los ajustes propios del mercado por la decisión de Fitch.
Principales referencias económicas y eventos de la semana
La principal referencia para los mercados financieros globales será la cifra de inflación en EUA Inflación
Adicionalmente, en EUA se publicará balanza comercial de junio; precios al productor de julio y sentimiento del consumidor de la Universidad de Michigan de agosto; así como el cambio en inventarios de petróleo y solicitudes iniciales de subsidio por desempleo.
En Alemania, dato de producción industrial de junio. De China, exportaciones de julio.
En México, habrá reunión de política monetaria de Banxico, dato de producción industrial de junio; inflación e índice de confianza del consumidor de julio.
Expectativa para el Tipo de cambio
El mercado cambiario mexicana todavía seguirá influido por la resaca del informe de empleo y la decisión de Fitch de recortar la calificación de la deuda soberana de EUA. Ahora toca el turno a la inflación estadounidense de julio. Por efecto base, se espera un ligero rebote a tasa anual. De nueva cuenta, unas cifras por debajo de lo anticipado podrían aumentar la probabilidad de una pausa en su endurecimiento monetario de la Fed y; viceversa. Por otro lado, China también será noticia con los datos de comercio exterior e inflación, que podrían acrecentar toda la especulación alrededor de mayores estímulos monetarios y fiscales en el gigante asiático. Hasta el momento todas las promesas de apoyo y medidas anunciadas son demasiadas vagas o de poca importancia. En México, todo parece indicar que Banxico dejaría sin cambios su tasa de fondeo en la reunión que sostiene esta semana y reiterarán que tienen la intención de mantenerla así por lo que resta del 2023. Dado lo anterior, durante la semana la moneda mexicana podría fluctuar entre los $16.80 y $17.25 spot.
Expectativa para las Tasas de interés
En el mercado primario, la tasa de Cetes a 28 días podría registrar un aumento; por su parte, el rendimiento para los bonos de 10 años en el mercado secundario podría moverse entre 8.80% – 9.10%.